Muelle Barón: El Triángulo de las Bermudas de Valparaíso
Escrito por Constanza Cáceres*
Pasado el reciente Seminario Valparaíso 2020, instancia creada para informar y aclarar los misterios que rodean los proyectos que modificarán la realidad de Valparaíso, no se pudo pasar por alto el hecho de que, si bien las intenciones eran buenas, nuevamente se volvió a dejar en el tintero el proyecto que más ha generado polémica: el sector del muelle Barón.
Para comprender con mayor precisión de lo que se está hablando, es necesario revisar ciertas tendencias de la zona. A grandes rasgos, el proyecto de renovación del borde costero de Valparaíso propone revertir la condición de obsolescencia que presentaba la zona. Esta iniciativa es consecuencia de externalidades tanto nacionales e internacionales, como por ejemplo, la apertura del canal de Panamá y el auge del Puerto San Antonio, que reactivan el rol portuario y renuevan así el sector, generando un núcleo turístico, inmobiliario, comercial y cultural. De esta manera, se intenta provocar una mutación desde la economía monofuncional a una multifuncional, convirtiéndose en un subcentro de Valparaíso. Dicho esto, cabe señalar que el sector destinado a la renovación del borde, y por tanto, el sector que experimentará más cambios en el entorno, blanco de la mayoría de las críticas, es el secreto proyecto muelle Barón, adjudicado a Mall Plaza. Esta fue la única empresa interesada (de seis originalmente), dada las poco atractivas bases para un privado; un 60% de suelo público y una limitante de altura de 9 metros, la que actualmente se encuentra en conflicto, no sólo por parte del privado y EPV (Empresa Portuaria de Valparaíso, perteneciente al Estado y a cargo del proyecto inmobiliario-turístico) sino también de la Municipalidad y de los ciudadanos. La polémica trata a grandes rasgos de que la propuesta de Mall Plaza supera en 7,5 metros la altura de las bases, pero que, curiosamente, no supera ninguna de las alturas de las edificaciones inmediatamente adyacentes.
La polémica de las alturas responde y oculta un problema mucho mayor y más relevante: la falta de acuerdo y negociación que existe entre los profesionales, ciudadanos, gobernadores, industriales y privados relacionados con el proyecto. Lo preocupante es que, este caso no es la excepción, sino lo que comúnmente sucede en la mayoría de los proyectos en Chile. Esto lleva a calar tan hondo hasta cuestionar el cómo estamos siendo educados como profesionales. Formados entre muros, sin instancias de relación, además de las estrictamente necesarias, con profesionales de otros rubros, como si aún viviésemos en la época de las cofradías. Entonces, es de esperarse que cada proyecto se transforme en una torre de Babel, donde cada elemento posee un lenguaje diferente y vela por sus intereses específicos y no por los comunes que, finalmente, es de lo que se trata hacer ciudad. En este caso, los distintos intereses se imponen y contraponen: Mall Plaza pretende sacar el mayor provecho del suelo que se adjudicó. Los ciudadanos y arquitectos quieren proteger (aunque erróneamente) la tradición y cultura de Valparaíso, los primeros afianzándose del tema de las alturas, los segundos declarando como patrimonio nacional los almacenes de la armada (a los que se hace necesario analizar su real riqueza como patrimonio) ubicados en terrenos destinados a la reactivación del puerto, obstaculizando la realización del proyecto original. Por otro lado, el Estado trata de imponer una renovación que más parece impuesta y forzada que natural y necesaria. Los industriales como ASONAVE (Asociación Nacional de Agentes de Naves de Chile) velan por los ingresos oponiéndose tajantemente a la inserción de un nuevo rol comercial y turístico en el muelle Barón, argumentando que el uso de suelo genera mucho mas ingresos al país si se destinara completamente a la actividad portuaria… y así la lista no termina.
Por otra parte, lo anterior, si bien no justifica lo siguiente, puede considerarse una causa importante para el surgimiento de la tan lamentable y recurrente falta de transparencia por parte de los privados a la hora de realizar proyectos de gran impacto urbano, que en variados casos ha caracterizado a los proyectos chilenos. La falta de acuerdo lleva a la postergación y burocracia, lo que hace finalmente que un proyecto tarde mucho más tiempo del inicialmente propuesto para concretarse. Podemos observar, sin embargo, que la mayoría de las partes involucradas convergen en un aspecto; todas buscan el cambio de lo preexistente, todas concuerdan en que algo debe hacerse para cambiar la decadente situación del borde costero de Valparaíso. Por lo tanto no se critica la intención de hacer algo, sino el modo sigiloso en el que esta intención se ejecuta y materializa. En estos casos el fin no justifica los medios, porque el primero está sumamente afectado y sujeto a los segundos. Se podría argumentar que participación ciudadana si ha habido, dado que existe polémica, pero lo cierto es que la participación de esta ha sido tan tardía, que no hubo ninguna instancia de plasmar en el proyecto las opiniones que transmitía la gente.
Finalmente, esto último lleva a preguntarnos una cuestión que es primordial para que los futuros y actuales arquitectos estén conscientes de su rol activo en la sociedad. La pregunta es; ¿Entonces, en qué etapa influyó el arquitecto? Hasta ahora, en lo único que se ha visto tomar parte fue en el lanzamiento, por parte del Colegio de Arquitectos de un “salvavidas” en la declaración de patrimonio nacional de los almacenes de la Armada, que no es más que un intento desesperado y demasiado tardío de tomar parte en este gran proyecto urbano. Entonces si no podemos tomar un rol protagónico en proyectos donde nuestra opinión debería ser decisiva en toda etapa y en lugar de esto, sólo es tomada como la de un ciudadano más, ¿Dónde quedamos, si no es aquí? Mal que mal, hacer ciudad ¿No suena como algo que los arquitectos deberíamos estar haciendo?
Bibliografía
- Minvu. Preparándonos para el Bicentenario : II Encuentro Internacional Gestión Estratégica del desarrollo urbano. Edición Directorio Ejecutivo de Obras Bicentenario, Gobierno de Chile. Santiago, Chile. Julio, 2003.
- Texido, Alberto. Seminario Valparaíso 2020: La misión de la Universidad y la necesidad de espacios para el debate sobre la ciudad. Plataforma Urbana [online], www.plataformaurbana.com. Diciembre 3, 2007
- Dougnac, Catalina. Borde Costero de Valparaíso: Aprobado Megaproyecto de Mall Plaza. Plataforma Urbana [online], www.plataformaurbana.com. Septiembre 28, 2006
Links Relacionados:
- Ministerio Obras Públicas, MOP.
- Proyecto IV Etapa MERVAL
- Ciudades y Puertos
- Skyscrapercity
- Terminal Pacífico Sur
- El Mercurio Valparaiso
- Oficina de Arquitectura y Urbanismo, URBE.
* Este Post corresponde a un paper escrito en el marco del ramo CTMA2 de Arquitectura en la UC, el segundo semestre de 2007.
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