Tecnología y muerte en Transantiago

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Imagen vía http://www.fotolog.com/trans_zona_f/

El 16 de Junio de este año Raúl Alberto Rojas de 45 años conducía el alimentador F-13 de la comuna de Puente Alto cuando 6 individuos que no validaron su pasaje lo golpearon brutalmente al bajarse, luego de que él los instara a pagar su pasaje.

3 semanas después falleció a causa -según indicó el hospital Padre Hurtado– por un shock séptico focopulmonar por hemorragia digestiva alta, al parecer inducido por los golpes recibidos ya que padecía de diabetes y cirrosis.

Pese a la complejidad de establecer la causa directa de su fallecimiento, la muerte de Raúl quedará registrada como el primer deceso en la era Transantiago, el plan que pretendía evitar los atracos a choferes y que prometía grandes avances en seguridad.

No era la primera vez que Raúl era agredido, en 20 años de trabajar como chofer de micro había sido asaltado en varias ocasiones y la última vez había sufrido una grave lesión en la cabeza. Solo en los últimos 2 años había sido asaltado 3 veces.

Según el Presidente de la Confederación Nacional de Trabajadores del Transporte y Afines de Chile (Conatrach) Pedro Monsalve, “alrededor de 20 choferes son agredidos diariamente por gente que no quiere pagar el pasaje debido a la mala frecuencia y al mal estado de algunos buses” (sic).

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Gran parte de los fondos de Transantiago fueron destinados a renovar la flota de buses antiguos, dotando a la nueva generación de máquinas de elementos de seguridad comunes en países desarrollados y que prometían terminar con los frecuentes asaltos y golpizas de los que eran víctimas los antiguos choferes de la locomoción colectiva.

Tecnología de punta que permitiría saber exactamente la posición de los buses, contar con una línea directa de voz bidireccional entre el chofer y la central, un botón o pedal de pánico para alertar de situaciones que requieran la intervención de la fuerza pública, así como cámaras de seguridad (ya implementadas en el sistema de micros amarillas) que permitiría grabar no sólo lo que pasa en la cabina del chofer, sino también en el resto del bus.

De todo esto, y pese a los millones invertidos en equipos, nada se encuentra funcionando.

No obstante que se ha anunciado en repetidas ocasiones la implementación definitiva del sistema de gestión de flota, este no se encuentra aún operativo, tal como lo señaló el propio ministro Cortázar este Lunes 28 de Julio en el Mercurio1 .

Hoy la comunicación entre el chofer y la central o terminal se hace por radio tradicional, implementado por algunas empresas de manera particular, sin estar integrado a un sistema global o conectado a Carabineros.

De que hablar del pedal de pánico, el cual alertaría de manera inmediata a las fuerzas del orden, detonando una rápida respuesta policial ya que el sistema de posicionamiento global (GPS) enviaría la posición del bus y la patrulla más cercana acudiría al instante para controlar la situación de peligro que se podría estar produciendo.

Las cámaras de seguridad que prometían grabar en directo y entregar información de la situación de los buses en tiempo real no se encuentran operativas. El mejor, o más bien el peor ejemplo de esto es que los individuos que atacaron a Raúl Rojas aún no han sido identificados.

Sin ir más lejos, en el día de hoy  se produjo una balancera al interior de un bus de Transantiago, dejando a 3 heridos entre los pasajeros. Aún no hay detenidos.

¿La situación sería la misma de haberse implementado el plan como debería? Juzguen ustedes.

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  1. “El presidente de la Confederación Nacional de Trabajadores del Transporte, Óscar Olivos (…) junto a otros dirigentes sindicales del Transantiago, recordó que aún no está disponible la tecnología que se prometió y que por licitación ganó Sonda. “Aún falta el software de gestión de flota, el botón de pánico, la cámaras de seguridad y el contador de pasajeros, y el ministro Cortázar no ha hecho nada. En este caso la empresa responsable, a través de la licitación, es Sonda la que no ha cumplido en nada lo que ofreció”. El ministro de Transportes, René Cortázar, reconoce que el sistema comenzó con carencias tecnológicas, pero que de a poco se han incorporado como los GPS y un sistema de gestión de flota provisorio. “Dentro de los próximos 30 días debiera estar operativo el sistema de comunicación con los choferes; por lo demás, ya existen varios operadores que lo tienen. El pedal de pánico y la cámara de seguridad se encuentran disponibles en la mayor parte de la flota, aunque aún quedan tareas pendientes en este campo”. Cortázar agregó que se han aplicado las sanciones que corresponden por los incumplimientos. Fuente: El Mercurio, Lunes 28 de Julio 2008  []