Período de tacos vehiculares crece, y capitalinos deberán salir a las 6:30 de sus hogares
Mientras el parque vehicular de la capital sigue aumentando, la construcción de infraestructura vial para los autos particulares se ha estancado, lo que incrementa los niveles de congestión en la capital.
RODRIGO CERDA Y SEBASTIÁN SOTTORFF
(El Mercurio – 02/12/2010)
El ingreso a la capital de un poco más de 130 mil vehículos nuevos en lo que va del año está provocando un aumento diario en los tiempos de congestión en diferentes lugares de la capital, especialmente en el sector oriente. Esto último se debe a que un poco más del 50% de los vehículos que se venden en el Gran Santiago se quedan en hogares de ese sector. El mejor ejemplo de eso es la comuna de Vitacura, que ya tiene prácticamente un vehículo por habitante.
Las cifras hablan por sí solas. Los vehículos nuevos que ingresaron a la ciudad en 2007 provocaron que en marzo de 2008 el flujo vehicular creciera en Santiago en 6%. A esto hay que sumar los cerca de 150 mil vehículos nuevos de 2008, los 97 mil del año pasado y los más de 130 mil que van en este año.
Este vertiginoso ritmo de ventas se ha consolidado durante 2010, pues según cifras de la Asociación Nacional Automotriz de Chile (ANAC) se espera que en todo Chile se comercialicen más de 280 mil autos nuevos.
Problemas en el transporte público
Pero los tacos no sólo afectan al vehículo particular, sino también a la locomoción colectiva. “Entre más tacos, más lento es también el flujo de los buses del Transantiago, y eso contribuye al déficit del plan”, explicó el ingeniero y doctor en transportes de la Universidad Diego Portales, Louis de Grange.
Por eso, agregó, la urgente necesidad de construir más líneas del metro y de comenzar a tratar en forma urgente el problema de la congestión vehicular, ya que, a su juicio, “los tiempos de congestión se duplicarán de aquí a cuatro años”, advirtió.
En ese sentido, la Unidad Operativa de Control de Tránsito (UOCT) adelantó que la infraestructura vial sólo ha aumentado en corredores para los buses del Transantiago, y que la vialidad no crece al ritmo del parque vehicular.
Así, el período de los tacos en la hora punta de la mañana está aumentando, según ingenieros de Transportes, porque los automovilistas comienzan a salir cada vez más temprano. Antes había congestión entre las 7:45 y las 9:00 horas, y luego ese período creció entre las 7:00 y las 9:00 horas. Tampoco se libran de este fenómeno las autopistas urbanas, que durante las horas punta registran un considerable nivel de congestión.
“No descarto que en un futuro cercano los automovilistas comiencen a salir de sus casas a las 6:30 horas, para tener las calles despejadas. Esto ya ocurre en Ciudad de México, donde los autos comienzan a moverse desde las 5:00 de la mañana”, puntualizó el ingeniero y doctor en transportes de la Universidad Católica, Juan Enrique Coeymans.
Asimismo, el ingeniero civil y especialista en tránsito de la USACh, Alejandro Torres, puntualizó que si bien la congestión vial siempre va a existir en la ciudad, el gran problema es que no se toman medidas de mitigación, no hay un ordenamiento de la ciudad o incentivos para bajarse del auto.
“Si hacemos acuerdos comerciales con otros países para que ingresen vehículos más baratos, también se debería dictar una ley que saque de las calles a los vehículos que cumplan cierta cantidad de años, para poder equilibrar el número de autos que transitan”, explicó. Y si bien el 6,4% de los autos que circulan en la capital tiene una antigüedad superior a los 10 años, hay estudios que comprueban que un auto de este tipo incide en los tiempos de desplazamiento del resto de los vehículos, e incluso contamina hasta 45 veces más que un auto nuevo.
280 mil
vehículos nuevos ingresarán al parque vehicular de Chile durante 2010. Esta optimista proyección se basa en el inédito aumento de las ventas automotoras, que sólo durante este año han crecido el 80% en relación al año pasado, cuando el mercado todavía estaba afectado por la crisis financiera. Hasta el momento, las ventas del sector durante el tercer trimestre de este año superan las 200 mil unidades, según la ANAC.
El profundo impacto vial de los 5.695 estacionamientos del proyecto Costanera Center
Después del cese momentáneo de las obras en 2009, el emblemático Costanera Center prontamente se transformará en el edificio más alto del país. Y pese a la satisfacción que generan los avances de las obras, la zona donde se construye este proyecto genera una gran preocupación, a nivel municipal y de Transportes, por la gran cantidad de vehículos que llegarán diariamente a ese lugar de Providencia.
El proyecto contempla un complejo comercial de cuatro torres de oficinas, dos hoteles y un mall con cinco niveles subterráneos y un total de 5.695 estacionamientos.
El gobierno anterior -y se espera que el actual insista en lo mismo- fue categórico en que sólo se podrá construir ese número de estacionamientos si se cumple plenamente con el estudio de impacto vial.
Por ejemplo, para dar luz verde a la etapa en la que queden operativos mil estacionamientos, la empresa a cargo del proyecto deberá habilitar los accesos de calle General Holley, y las avenidasVitacura y Andrés Bello. Además, se tendrá que ejecutar la calzada de Nueva Tobalaba, entre Andrés Bello y Vitacura.
Asimismo, se deberá materializar el Puente Costanera (Tajamar poniente) sobre el río Mapocho, con tres pistas sentido norte-sur y acera peatonal al costado poniente, entre otras obras.
Sumarle dos mil estacionamientos más significará construir una pasarela peatonal sobre Holanda y Vitacura, con acceso al proyecto vía ascensor y escalera mecánica que se conectará al tercer nivel del mall.
Tener operativos los 5.695 estacionamientos implica, entre otros trabajos, la construcción de un túnel en avenida Andrés Bello, tramo Costanera Sur-Suecia.
El costo de todas las obras de mitigación vial para el máximo número de estacionamientos operativos tiene una cifra cercana a los 60 millones de dólares, por lo que Cencosud y el MOP mantienen conversaciones en torno a la ejecución de estas obras complementarias.
Seguridad vial disminuye mientras el número de autos crece
El explosivo aumento que han registrado las ventas de automóviles en la capital ha influido de manera directa en el número de accidentes vehiculares. Así lo confirma el mayor de Carabineros y comisario de tránsito de la capital, Marcelo Ávalos. “Los accidentes de tránsito crecen a un ritmo proporcional con la ampliación del parque vehicular de Santiago. La mayor cantidad de siniestros es una clara consecuencia relacionada con la creciente motorización en la ciudad”, afirmó. En ese sentido, la implementación de planes por parte de la institución y las autoridades no sólo se dirigirá al aumento de la dotación policial en las calles, sino que también a la incorporación de tecnologías para fiscalizar más eficientemente el tránsito.”Tenemos que impulsar iniciativas tendientes a minimizar los accidentes generados por este fenómeno, como la licencia con puntaje, los controles de velocidad y la fiscalización para evitar el consumo de alcohol en la conducción”, agregó.
Rodrigo Delgado, alcalde de Estación Central y presidente de la Comisión Técnica de Tránsito de la Asociación Chilena de Municipalidades, coincide en que el problema de la congestión no radica en la creciente venta de automóviles. “No podemos evitar el crecimiento del parque vehicular, pero sí debemos fortalecer el Transantiago y volver a reencantar a la gente con el transporte público”, expresó.