Parte segunda etapa de Parque Bicentenario y en julio de 2011 sería abierto
A las 18 hectáreas existentes se sumarán 12 más, que en total tienen un costo de $ 11.000 millones.
por Carlos Palacios
(La Tercera – 23/11/2010)
La obra ya está en marcha. Ayer, al mediodía, comenzaron a funcionar las retroexcavadoras en los terrenos donde se levantará la segunda etapa del Parque Bicentenario, en Vitacura, en el tramo ubicado entre la rotonda Pérez Zujovic y Av. Alonso de Córdova.
A esa hora, el alcalde de la comuna, Raúl Torrealba, dio el vamos a la construcción de este proyecto, ceremonia a la que asistieron el intendente metropolitano, Fernando Echeverría; la ministra de Bienes Nacionales, Catalina Parot, y la jefa de la cartera de Medio Ambiente, María Ignacia Benítez.
En 2007 fueron inauguradas las 18 hectáreas de áreas verdes y de esparcimiento en este sector de Vitacura, y una vez finalizadas las obras de esta segunda etapa, el parque alcanzará un total de 30 hectáreas. En el nuevo sector se construirán un anfiteatro con capacidad para 10.000 personas, una laguna, un museo interactivo, ciclopaseos y 90 estacionamientos.
El financiamiento del proyecto -cuyas obras se extenderán hasta julio de 2011- corre por cuenta de la municipalidad. “La segunda fase tendrá un costo cercano a los $ 4.000 millones y el parque completo costará unos $ 11.000 millones, aproximadamente”, explicó el alcalde Torrealba.
El intendente Fernando Echeverría destacó el aporte que significa este pulmón verde para Santiago. “Hay una carencia muy grande de parques en la ciudad. Tenemos en promedio tres hectáreas por habitante, mientras que las normas internacionales recomiendan llegar a nueve hectáreas por habitante. El levantamiento (de esta segunda etapa) contribuye a suplir el déficit”, aseguró.
Efectivamente, la iniciativa considera plantar 1.500 árboles, entre los cuales figuran tuliperos, encinas, plátanos orientales, peumos, espinos y quillayes. Al mismo tiempo, se instalarán 9.000 especies de arbustos. Estos serán regados con un sistema automático, que se controlará con un computador central para optimizar los ciclos y reducir los tiempos de riego.
Según Teodoro Fernández, arquitecto a cargo del diseño de la primera y segunda etapa de construcción, la idea era aprovechar los elementos presentes en el paisaje e incorporarlos en la obra arquitectónica del parque. “Por ejemplo, en lugar de incluir al río Mapocho, que está bordeado por las autopistas ruidosas, se optó por levantar estas lomas en el costado norte del parque, para darle continuidad y conectarlo visualmente con los cerros que están atrás”, explica el arquitecto. Hacia la rotonda Pérez Zujovic, en cambio, el panorama es distinto. “Intentamos crear una especie de gran muelle con vista hacia lo urbano, justo al sector donde se ubican las torres más altas de Santiago”, agrega.
Respecto del equipamiento que tendrá esta nueva zona, el edil de Vitacura cuenta que el tipo de museo no se ha definido aún: “Es una idea en desarrollo, pero hay dos posibilidades: un museo astronómico, a cargo de la Organización Europea de Investigación Astronómica (ESO), o uno que rescate las tradiciones y costumbres chilenas”.