Encuesta revela que santiaguinos prefieren un buen barrio antes que una vivienda de calidad
Según un estudio de la Universidad Diego Portales, el 74,3% de las personas privilegia el entorno social antes que su casa.
por Benjamín Blanco
(La Tercera – 01/12/2010)
Aunque el sueño de una casa propia es una aspiración clave entre los santiaguinos, especialmente quienes pertenecen a la clase media, un estudio de la Universidad Diego Portales reveló que el 74,3% de los habitantes de la capital prefieren vivir en un buen barrio antes que poseer una vivienda de calidad.
En el estudio, que se enmarca en la Encuesta Nacional de Opinión Pública UDP 2010, se entrevistó a 600 personas de diferentes estratos sociales del Gran Santiago. Ante las afirmaciones “prefiero una buena casa en un barrio regular” o “prefiero una casa regular en un buen barrio”, sólo un 23,5% se inclinó por la primera y un 74,3% por la segunda.
“Existe bastante identidad con los barrios de la mayoría de los habitantes del Gran Santiago, independiente del grupo socioeconómico y el género”, explica Felipe Link, coordinador del área social de la encuesta. “Esto se debe a las posibilidades de control del entorno inmediato. Es decir, la casa puede esperar, se le harán modificaciones, se va “arreglando de a poco”, mientras que el barrio es dado, hay pocas posibilidades de intervenir sobre su desarrollo puesto que los grados de participación ciudadana en Santiago son bajos”, añade Link.
Según Javier Wood, jefe de la División de Desarrollo Urbano del Minvu, el resultado evidencia un cambio respecto a la calidad de vida de la gente, “Las personas no sólo quieren viviendas de calidad, sino también barrios de calidad. Se debe avanzar en el empoderamiento y en la apropiación de los vecinos con sus espacios, pues el barrio es el conjunto de una vivienda y de los espacios públicos”, explica Wood. “Como ministerio hemos trabajado la escala barrial y se ha demostrado que cuando la gente conoce y se apropia de ese espacio extra vivienda, lo valora y lo cuida”, agrega.
A diferencia de las encuestas de opinión pública anteriores, por primera vez la UDP preguntó sobre los atributos y las preferencias que la gente manifiesta sobre el barrio. “Quisimos evaluar la importancia del entorno que es el mediador entre el espacio privado, familiar e individual de la casa y el espacio anónimo de la gran ciudad”, dice Link.
Desglosado por segmentos económicos, en el sector alto (ABC1), un 83,1% antepone la calidad del barrio ante las características de su casa, mientras que en el sector socioeconómico más bajo (D) un 71,7% de los encuestados valora más su entorno que su vivienda. En los sectores medios que participaron en la encuesta, un 73,1% prefiere un buen barrio.
Para Carolina Contreras, académica de la Facultad de Arquitectura de la UDP, la elección de un barrio va de la mano de cierto estatus social. “En el barrio existe un vínculo con el nivel de ingreso y, por lo tanto, con cierta calidad de vida. De alguna manera, el barrio es sinónimo de localización y se privilegia eso y no los equipamientos o las aéreas verdes”, explica.
Gusto por el entorno
Los resultados de la encuesta también demostraron que los habitantes de Santiago sienten gran aprecio por sus vecinos y que confían en ellos, especialmente en casos de emergencia. Ante la afirmación “en caso de necesidad, siento que puedo contar con mis vecinos”, un 60,1% dijo estar de acuerdo y un 14,1% en desacuerdo. En esa misma línea, un 61,3% de los encuestados creen que sus vecinos los ayudarán ante un acontecimiento negativo.
“La mayoría cree que puede confiar en sus vecinos en caso de necesidad, lo que probablemente no sería posible si es que no se identificara al barrio como un lugar donde los habitantes comparten los mismos valores”, concluye Link.