Gener reanuda construcción de termoeléctrica Campiche
Los 18 meses en que los trabajos estuvieron suspendidos provocaron unos US$ 70 millones de sobrecosto, por daños en la estructura como en algunas maquinarias.
J. Esturillo y M. Gutiérrez
(El Mercurio – 28/04/2011)
En abril y tras 21 meses de paralización, la eléctrica Gener reinició oficialmente la construcción del proyecto termoeléctrico Campiche, ubicado en la Región de Valparaíso, y que inyectará 270 MW al Sistema Interconectado Central (SIC).
“En estos momentos hay más de mil personas trabajando en Campiche y esperamos tener la central operando a principios de 2013”, informó el gerente general de la eléctrica, Felipe Cerón, hace un par de días en el marco de la junta de accionistas de la compañía.
A fines de enero pasado, la Justicia descartó los dos últimos recursos legales que trataron de impugnar el permiso municipal de obras del proyecto, que fue expedido en agosto de 2010. Esto dejó vía libre a Gener para ordenar el reinicio de la construcción de este proyecto, cuya inversión originalmente fue estimada en US$ 500 millones.
Es así que en febrero, la coreana Posco -que tiene a su cargo la construcción del complejo- retomó la actividad al interior de la obra. Hasta fines de marzo los trabajos que allí se desplegaron correspondieron a la recuperación de la estructura que ya estaba montada al momento de la paralización, en junio de 2009 y que representaba el 40% del proyecto total.
Conocedores del tema indicaron que el efecto corrosivo del ambiente costero no sólo se dejó sentir en las estructuras metálicas que soportan la central, sino que también en algunas de las maquinarias que conforman la unidad y que ya habían sido montadas cuando la Corte Suprema ordenó el desalojo del proyecto, cuyas obras civiles fueron encargadas por la firma asiática a la constructora chilena SalfaCorp.
Sobrecosto
Fuentes de la industria consultadas por ValorFuturo indicaron que el impacto de los 22 meses de paralización de Campiche implicó un sobrecosto en torno a los US$ 70 millones, cifra que Cerón no estuvo dispuesto a confirmar. La suma, al parecer, no incluye otros costos asociados a no haber contado con la producción de esta unidad a partir de mayo de 2011, cuando inicialmente el proyecto entraría en operación.
Este monto representa un incremento de 14% respecto del presupuesto inicial de esta central termoeléctrica en base a carbón, aunque es inferior a los US$ 186 millones que inicialmente la matriz de la eléctrica, AES Corp, estimó como costo total de este impasse.
El problema para Campiche comenzó en junio de 2009 cuando la Corte Suprema ratificó un fallo de primera instancia que revocó el permiso ambiental de la iniciativa, por un vicio administrativo relativo al uso de suelo del terreno donde está emplazada la unidad.
Tras un cambio en la ley de Urbanismo y Construcción, impulsado en enero de 2010 por el gobierno de Bachelet, en febrero de ese año Gener logró obtener un nuevo permiso ambiental. Éste también fue impugnado sin éxito ante tribunales, hasta que en agosto pasado el municipio de Puchuncaví emitió el permiso definitivo de obras.
Eléctrica conseguiría más gas natural para Nueva Renca
Conscientes del rol clave que la central Nueva Renca está jugando para el normal abastecimiento del SIC en medio del escenario de sequía y restricciones de transporte eléctrico, Gener tratará de seguir operándola con gas natural más allá de junio, cuando Metrogas dejaría de contar con excedentes para entregarle a la eléctrica. Ésta opera en forma más segura, utilizando este hidrocarburo.
“Dependerá mucho de la hidrología, pero si el año sigue seco, veremos una forma para seguir quemando gas en Nueva Renca”, dijo el gerente general de la compañía, Felipe Cerón.