Caso Kodama hizo cambiar la forma de ejecutar las obras y las licitaciones en el Serviu
La construcción de corredores sufrió un atraso en la entrega de los trabajos.
(El Mercurio – 16/08/11)
Por Rodrigo Cerda
A comienzos de diciembre próximo, Transantiago pondrá en operación un nuevo corredor (denominado también vía rápida), Peñalolén-Grecia-Alameda, que conectará el sector oriente con el centro de la ciudad.
Si bien dicha ruta -que tendrá cinco zonas pagas definitivas y de alto estándar- se debió haber inaugurado en el primer semestre de este año, en el Servicio de Vivienda y Urbanismo (Serviu) reconocen que la situación generada por el caso Kodama hizo que la construcción y entrega de éste, y de otros corredores, se atrasara (ver infografía).
Para Transantiago, los corredores son muy importantes para el buen desplazamiento de los buses, pues sin ellos las máquinas tienen que salir a pelear su espacio en las calles, las que en las horas punta están atiborradas de vehículos, generando demora y mal servicio para los pasajeros.
La empresa Kodama construyó el corredor Pedro Aguirre Cerda. Sus costos y plazo de entrega se incrementaron porque el Estado nunca entregó a tiempo los cambios de servicios (agua, postes de luz, cableado de telefonía y TV cable) y expropiaciones, obligando a la compañía a hacerse cargo de esos temas.
Tanto así, que aún hay tramos construidos de ese corredor que están en terrenos que son propiedad de Kodama, que debió comprarlos.
Para que esto no se vuelva a repetir, el Serviu entrega hoy los proyectos a los contratistas con los cambios de servicios y las expropiaciones bastante más avanzados que como se hacía antes.
El director del Serviu, Daniel Johnson, asegura que el caso Kodama demostró que la forma en que el Serviu estaba haciendo las cosas no era la requerida.
“Antes se trataba de licitar lo más rápido posible, para empezar las obras, pero al mismo tiempo no se tomaban los resguardos necesarios, como tener listo el tema de las expropiaciones, antes de que empezaran las empresas a trabajar, o que estuvieran listos los cambios de servicios, como por ejemplo el tema de postes”, detalla.
Asimismo -asegura John-son-, esta nueva forma de trabajar, con las expropiaciones y los cambios de servicios con antelación, hizo modificar las bases de licitación de las obras.
Otro cambio que se produjo con los proyectos de los corredores es el relativo a la socialización de los mismos.
“Hoy día -antes no se hacía-, estos proyectos se conversan con los vecinos y con el municipio, de manera de acoger y discutir las diferencias”, explica Edgardo Salazar, subdirector de Pavimentación del Serviu.
A la fecha, hay tramos de corredores que nunca han sido recibidos por el alcalde, dado que no le gustó el resultado de la obra.
Lo anterior ha significado que en algunos casos las cuentas de luz del corredor deban ser pagadas por el Serviu, porque la vía nunca fue recepcionada por el municipio.
Transantiago relicita zonas
Mañana vence el plazo para que los operadores del Transantiago hagan sus ofertas por las actuales zonas alimentadoras, cuya concesión termina el 22 de octubre del presente año. Para esto, Transportes envió dos documentos de trabajo a los gerentes generales de las empresas de buses, uno de 25 y otro de 44 páginas, donde detalla las condiciones que deben cumplir para negociar por una o más zonas.
La cartera ha insistido que la solución de varios problemas que aún tiene el sistema pasa por renegociar los contratos, lo que pretende conseguir con esta nueva licitación de las zonas alimentadoras.