Iniciarán plan de pavimentación de verano en 240 calles del Gran Santiago
Iniciarán plan de pavimentación de verano en 240 calles del Gran Santiago
Las obras se realizarán en avenidas como Providencia, Santa María, Bellavista, Vitacura y Las Condes.
por Manuel Valencia
A partir de enero próximo se iniciará la ejecución del plan de pavimentación de verano en el Gran Santiago.
Este año, el programa del Ministerio de Vivienda y Urbanismo y ejecutado por el Serviu Metropolitano abarcará más de 240 calles de las 34 comunas de la ciudad.
Con ello se pavimentarán cerca de 80 kilómetros de calles y avenidas, con una inversión de 14.900 millones de pesos, aportados por los ministerios de Vivienda y Obras Públicas.
La idea de las obras es extender la vida útil de las vías en, al menos, cinco años y disminuir los riesgos de accidentes que provocan los baches y el daño en los pavimentos.
Entre las arterias que se reconstruirán este año hay algunas emblemáticas, como Providencia (por la calzada sur, entre Vicuña Mackenna y Miguel Claro), Santa María (entre Pío Nono y Puente del Arzobispo), Las Condes (entre Apoquindo y Carol Urzúa, y entre Padre Hurtado y Manantiales) y Vitacura (entre Américo Vespucio y Cuernavaca, y luego entre Padre Hurtado y El Manantial).
Asimismo, se asfaltarán tramos de las avenidas Tobalaba, Larraín, Simón Bolívar, Vivaceta y Bellavista.
La ejecución de las obras actualmente está en proceso de licitación y, según el cronograma del Serviu, debiese adjudicarse el 22 de noviembre próximo. Luego, los trabajos deben iniciarse a principios del próximo año, para culminar entre abril y mayo.
Puro asfalto
En la mayor parte de los casos, los trabajos consisten en el reemplazo de las carpetas de asfalto por otras nuevas.
También se realizarán faenas de fresado, que consiste en quitar la capa deteriorada para reemplazarla por una nueva. Asimismo, se aplicarán labores de bacheo, que implican tapar hoyos de alta peligrosidad en las pistas.
Luego de ejecutado el nuevo pavimento, se demarcarán las vías y se instalará nueva señalética.
Para ejecutar las obras, Serviu aplicará una modalidad de intervención rápida, que busca generar las menores molestias para los automovilistas y transeúntes.
En ese sentido, optó por la utilización del asfalto en lugar de hormigón. La aplicación de este material permite que las calles sean rápidamente intervenidas y las obras se entreguen al uso vial en menos de cinco días. En cambio, con el hormigón, las calles deben permanecer cerradas por al menos un mes.
Con esta modalidad se evita generar congestión y caos vial en vías estructurantes, como Providencia, Pedro Fontova -donde se generan los mayores tacos de Huechuraba-, Las Condes o calles de alto uso peatonal, como Biobío, en el barrio Franklin.
Para ejecutar las obras, Serviu implementará un plan de difusión de los futuros desvíos, a medida que los trabajos sean adjudicados por las empresas.