Identifican cuatro fuentes de malos olores en planta de Agrosuper de Freirina
Por Rodrigo Álvarez Malla, El Mercurio.
Estudio encargado por Comisión de Evaluación Ambiental:
Documento propone “narices electrónicas” para medir la pestilencia, aceite vegetal que atrapa los hedores y cambios en la dieta de los cerdos.
Cuatro fuentes son las responsables de la emanación de malos olores desde la planta de cerdos de Agrosuper, en Freirina, Región de Atacama, según el estudio realizado por la consultora norteamericana Wenck Associated y la Universidad de Minnesota. El documento fue encargado por la Comisión de Evaluación Ambiental (CEA) para analizar la recalificación ambiental de la planta, que fue cerrada en mayo.
El informe, de 227 páginas, explica que las falencias son la falla de los aireadores de la planta de tratamiento de purines (excremento) y agua del complejo agroindustrial que criaba a 480 mil cerdos. Los otros focos corresponden a los pozos homogeneizadores, que juntaban los purines de los animales; las canchas de compostaje y el traslado de los cerdos, que aún se realiza sólo en camiones enjaulados sin ningún filtro o protección ambiental.
“El tratamiento de purines, que es lo que falló en la crisis, era lo adecuado. Lo que no es adecuado es la forma en que opera la planta”, señaló el seremi de Medio Ambiente, Mario Manríquez, como una de las principales conclusiones de ese estudio.
Para todas estas fuentes de malos olores, el informe de la consultora externa sugiere 34 conclusiones que la CEA analizará para imponer o no a la empresa Agrosuper a través de una modificación de la Resolución de Calificación Ambiental (RCA).
Manríquez señaló, por ejemplo, que en el tema del compostaje, los expertos sugieren el uso de Ecosorb, “un neutralizador de olores que es un producto en base a aceites vegetales que se pulveriza y este aceite capta las partículas de malos olores”. La autoridad afirmó que la empresa ya la está implementando como marcha blanca.
Sobre el traslado de animales, el estudio sugiere vías más alejadas del proyecto, sin pasar directamente por la comunidad. Ello implicaría la construcción de nuevos caminos que no pasen por el valle del Huasco.
Pese a que en el informe, según el seremi, los especialistas concuerdan con Agrosuper que la tecnología usada en el complejo es la adecuada en términos generales, se sugiere la utilización de nuevas herramientas especialmente en el monitoreo de olores, que hasta el momento sólo se hacía con un panel de expertos “catadores de olores”. Éstos utilizan sólo su olfato.
“Sería un monitoreo más objetivo, con parámetros mucho más medibles y eso podría hacerse con aparatos que se llaman ‘narices electrónicas’, que miden la presencia y las concentraciones de determinados gases que generan los olores”, cuenta Manríquez.
La consultora y la universidad norteamericana proponen también cambiar las dietas de los cerdos “para reducir los niveles de nitrógeno, zinc, cobre y fósforo en los purines”, dice textual el informe. El seremi explica, que, por ejemplo, el zinc es un agente bactericida que elimina las bacterias que se “comen las partículas de mal olor”, lo que redunda en los hedores.
Pero la autoridad, al detallar el estudio, insiste en que la falla de la planta de tratamientos de purines, y no el número de cerdos en el complejo, fue la causa principal de la crisis.
“Lo que estaba construido estaba adecuado al número de cerdos, en condiciones de operaciones normales, es decir, sin considerar la falla de la planta de tratamiento de purines. El problema de esa falla es que tenía repercusión en el resto del proceso: el agua mal tratada recirculaba y servía para lavar los pabellones, que no estaban hediondos sólo por la presencia de cerdos, sino porque se lavaron con agua que ya estaba hedionda”, explicó.
La próxima semana se reunirá la CAE para analizar este informe y decidir sobre sus propuestas. “El compromiso de la empresa en su RCA fue no generar olores molestos y eso fue lo que no se cumplió”, dijo Manríquez.