Querella por daños que dejó la rotura de matriz de agua
Dirigentes vecinales interpusieron acción contra Esval. Turismo evalúa perjuicios.
Mauricio Silva, El Mercurio
La Unión Comunal de Juntas de Vecinos de Valparaíso interpuso una querella criminal contra la sanitaria Esval a raíz de la rotura de la matriz gran alimentadora en el cerro Ramaditas, el domingo. El aluvión arrasó dos casas, dejó otras 14 inhabitables, dañó un taller mecánico y una bodega, y destruyó la planta baja del Hotel Puerto Paraíso.
La querella, patrocinada por el abogado Alejandro Chaparro, atribuye a la empresa la autoría del delito de “estragos” causados mediante medios catastróficos y de “daños”, descritos en los artículos 480 y 484 del Código Penal. Los querellantes, dirigentes del cerro afectado y dos concejales acusan a Esval de saber que la matriz está en malas condiciones e incurrir en el delito por omisión.
El escrito señala que la Superintendencia de Servicios Sanitarios le pidió en 2009 a Esval reponer los 10 km de tubería de la Gran Alimentadora, pero la firma contrató un contraestudio para reducir la tarea a 2,8 km. Añade que el año pasado, tras una rotura de menor magnitud, Esval se negó a exponer el estado de sus tuberías a los concejales.
En tanto, medio centenar de empresarios turísticos del puerto se reunieron para analizar los perjuicios causados y sumarse a la querella. Esval dijo que los vecinos están en su derecho de presentar acciones legales.
