Las obras que Santiago requiere con urgencia, pero que nadie apura
Av. Matta, Lo Espejo y V. Mackenna mantienen nudos viales, pero la resolución se ha postergado.
Por F. Polanco y F. Fuentes, El Mercurio
¿Recuerda haberse enfrentado de improviso al angostamiento de la calle al ir conduciendo o situaciones en que, pese a existir terreno disponible, la comunidad lleva meses esperando por la pavimentación de unos pocos metros? Es la situación de los nudos viales que la comunidad de Santiago exige mejorar, pero que lleva meses a la espera de una solución.
De ellos opinan los propios usuarios. Así ocurre, por ejemplo, en avenida Lo Espejo, donde los vecinos ya no recuerdan desde cuándo esperan que se pavimente un sector reservado como calzada pese a que opera como vereda y está separado por postes de alumbrado. De hecho, al costado de la calle existe una vereda de más de tres metros no pavimentada que es suficiente para construir otra pista.
Desde el Serviu respondieron que efectivamente el ensanche está en estudio. La iniciativa estaría en fase de ingeniería, pero habría que esperar al menos un año más para poder disfrutar de las ciclovías, paisajismo e iluminación que allí se proyectan.
Pero estos problemas no solo afectan al surponiente de la capital. En La Reina, la falta de una conexión vial que una la calle Pérez Rosales con Las Condes y Peñalolén pena a diario a los automovilistas, que deben rodear el parque Padre Hurtado. El Serviu también anunció un proyecto para descongestionar, pero aún no se anuncia la fecha de partida.
En avenida Manquehue, el problema es otro: los usuarios saben que el taco es permanente. Según el MOP el problema radica en las obras que se desarrollan en el enlace con Kennedy. La cartera aseguró que el problema se solucionará cuando estén construidos los dos nuevos puentes sobre Av. Manquehue, que pretenden aliviar el sector.
Un conflicto similar se vive en Vicuña Mackenna, específicamente en las intersecciones con Irarrázaval y Providencia. El problema radica en que los buses deben detenerse en los paraderos y luego volver a su corredor, dejando una estela de bocinazos y frenadas a su paso.
Según el Ministerio de Transportes, estas situaciones se resolverán con la corrección en el sistema de planificación que la cartera impulsa para “evitar que la congestión siga creciendo”, pero no aporta una solución.
Para la modista Margarita Echeverría, que a diario conduce por Av. Matta entre Vicuña Mackenna y la Ruta 5, “aquí, todos los días hay choques y los autos se suben al bandejón para evitar accidentes. ¡Hagan algo por favor!”, pide.
El caso es que, en la vereda norte de Matta, la intersección con San Diego es un punto de conflicto debido a que la calzada pasa bruscamente de cuatro a tres pistas, debido a la presencia de estacionamientos municipales. Según el departamento de Tránsito de Santiago, “algunos nudos viales tienen variables distintas y que corresponde un trabajo más de gestión que una intervención estructural. Ambos casos serán revisados en los próximos días.
La caletera de Américo Vespucio Sur, en la comuna de La Granja, es otro foco de accidentes que no da tregua. ¿La razón? Justo en ese tramo la salida de la autopista se conecta con la caletera, pero el cartel de “ceda el paso” se encuentra varios metros atrás, generando otro nudo indisoluble.
Otro ejemplo es la conexión entre Av. Chicureo y la carretera San Martín. Ahí, los conductores arriesgan su integridad intentando sortear a quienes vienen de Chacabuco, a más de 100 km/h.