Autopista Vespucio Oriente será la más cara de Santiago
Cuando se inaugure, en 2020, recorrer un kilómetro costará en promedio $ 120, versus los $ 50 de C. Norte y los $ 48 de A. Central.
Por P. Cofré y D. Villegas, La Tercera
En siete años más, cuando según el cronograma del MOP se abra la autopista Américo Vespucio Oriente (AVO), los santiaguinos podrán circular desde El Salto, en Huechuraba, hasta Av. Príncipe de Gales, en La Reina, en sólo ocho minutos y no en una hora, como ocurre hoy.
Para poder usar esa nueva infraestructura urbana de 9,3 kilómetros, que comenzó a licitarse ayer, deberán pagar, eso sí, más de $ 1.000.
Esto, porque cada 1.000 metros los capitalinos deberán desembolsar, en promedio, $ 120. El valor corresponde a la tarifa base, es decir, a la del horario normal, que se suele extender entre las 10 y las 17.30 horas.
El monto no sólo será mayor que el que se cobra en los mismos horarios en las otras autopistas, como la Costanera Norte, la Autopista Central y la Vespucio Sur, entre otras, sino que superará los valores que cobran éstas por kilómetro en las horas punta (entre las 07.30 y 10 horas y entre 17.30 y 20.30 horas).
Por ejemplo, la Costanera Norte tiene una tarifa de $ 50 por kilómetro en horario normal, mientras a igual hora la Radal Nororiente vale $ 60, la de Vespucio Norte $ 47, la de Vespucio Sur $ 45 y la de Autopista Central $ 48 (ver recuadro).
La única concesionaria urbana que está por sobre los valores de AVO es el túnel San Cristóbal, con $ 131 en horario normal por kilómetro. Pero éste no es una autopista.
El experto en transporte de la Universidad Diego Portales, Louis de Grange, asegura que los viajes incluso serán más caros. “Los precios de la futura vía rápida en horario punta subirán en una proporción muy parecida a la que existe hoy en las otras autopistas. Por lo tanto, será un aumento cercano al doble del precio base”, explica el académico.
Una de las novedades de AVO es que contará con pórticos sólo en las siete salidas y las ocho entradas de la autopista, además de los seis cruces con otras vías concesionadas. En esos puntos se registrará a los usuarios, pero sólo se les cobrará cuando emerjan a la superficie. “Esto, porque se facturará sólo por la longitud viajada. Así, se detectará exactamente el punto de ingreso y de egreso, lo que ya es un avance”, explica el director de la Facultad de Arquitectura de la UDD, Pablo Allard.
Proyecto con historia
En 2005, el MOP comenzó a evaluar la instalación de una autopista concesionada en el sector oriente de la Av. Américo Vespucio, es decir, entre El Salto y Av. Grecia. Durante varios años se realizaron estudios, se entregaron distintas propuestas (vía rápida en superficie, elevada, por túnel minero y trinchera cubierta) y se llevó a cabo una serie de complejas negociaciones con los municipios y vecinos. Esto, para llegar a concretar el proyecto en 2020.
En marzo de este año, el MOP creó una mesa técnica, compuesta por los arquitectos Pablo Allard y Félix de Amesti y el académico Louis de Grange, con el fin de desarrollar un plan completo. Este fue el que se licitó ayer y que incluye el diseño, los estudios de ingeniería y luego la construcción y explotación de la ruta.
“Vespucio Oriente será un gran aporte a la conectividad de la ciudad y a la calidad de vida de 700.000 santiaguinos, porque no está pensada sólo en los autos, sino que también en las personas. Tiene una mirada integral, que incluye un parque y un mobiliario especial para cada sector”, comentó la ministra del MOP, Loreto Silva.
El primer tramo, entre El Salto y el puente Centenario (sobre Av. Escrivá de Balaguer), modificará totalmente la zona de La Pirámide. La tradicional bajada quedará en dirección norte y contará con una ciclovía y miradores. La vía que va al oriente, en tanto, irá por un nuevo túnel que perforará el cerro San Cristóbal.
El resto del camino hasta Av. Príncipe de Gales será una trinchera de dos pisos, cubierta con un parque.
Según el cronograma del MOP, las ofertas para el plan total se recibirán hasta noviembre y en el primer trimestre de 2014 se adjudicará. La construcción partirá en 2016 y tendrá un costo de US$ 926 millones.
Para definir la empresa ganadora se tomará en cuenta el oferente que pida menor cantidad de ingresos totales por los 40 años de concesión de la autopista. En caso de que ese criterio no sea definitorio, se elegirá a la concesionaria que solicite un menor subsidio estatal, el que no podrá superar el 25%.