Concepción construye la primera “Nanoplaza” para recuperar un espacio público deteriorado
Transformar ciertos sectores deteriorados de Concepción en nuevos espacios públicos permanentes es el objetivo del proyecto “Nanoplaza”, una iniciativa impulsada por la municipalidad que pretende recuperar terrenos de superficie acotada.
El lugar escogido para iniciar este proyecto fue la céntrica calle Caupolicán, entre Barros Arana y Freire, cerca de la Plaza Independencia, en donde un terreno de 1.300 metros cuadrados está siendo intervenido para construir una plaza equipada con árboles, nuevo mobiliario urbano (como bancas y basureros), luminarias con tecnología LED y veredas de mejor calidad para facilitar el desplazamiento seguro de los peatones.
De esta manera, la idea es crear nuevos lugares de encuentro que siguen la línea de las tradicionales plazas para regenerarlos en términos urbanos y así fomentar que los habitantes puedan disfrutar al aire libre, apropiándose de los espacios públicos mediante su uso.
El proyecto tiene un costo de $168 millones que provienen del Fondo Nacional para el Desarrollo Regional (FNDR) y se estima que estaría listo durante el primer semestre de este año.
En el caso de la primera “Nanoplaza” de Concepción, la construcción considera mantener el diseño que tiene el Boulevard Barros Arana e incorporar un monumento al periodista y sacerdote Camilo Henríquez (1769 – 1825), que fue solicitado por la sede local del Colegio de Periodistas, para homenajear a quien fundó la Aurora de Chile, el primer periódico chileno creado tras la Independencia.
Un proyecto similar es el que en Santiago está impulsando la Intendencia Metropolitana y ejecutando la Dirección de Arquitectura del Ministerio de Obras Públicas (MOP), con la habilitación de las denominadas “Plazas de Bolsillo”.
La primera de ellas fue inaugurada en enero pasado en la calle Morandé 83, entre los edificios de la Intendencia y del MOP, en un terreno que permanecía cerrado a los transeúntes. No obstante, desde ahora está disponible para que cualquier persona que pase por el lugar pueda tener un momento de relajo en pleno centro.
Así, la idea es recuperar sitios eriazos de otros sectores de la ciudad y abrirlos a la ciudadanía como nuevos espacios públicos.