La restauración del palacio Baburizza

El palacio Baburizza fue construido en 1916 para la familia Zanelli por los arquitectos Renato Schiavon y Arnaldo Barison para luego ser adquirida por don Pascual Baburizza, de ascendencia yugoeslava. Posteriormente pasó a manos de la I. Municipalidad de Valparaíso, para instalar el 8 de julio de 1971 el museo Municipal de Bellas Artes, ese mismo año fue declarado monumento nacional.

Sin embargo, el lugar se cerró en 1997, producto de su creciente deterioro.

Esto hasta que el Centro de Conservación, Restauración y Estudios Artísticos (CREA) en conjunto con la Compagnia Italiana di Conservazione plantearon el desarrollo de un proyecto de restauración para el museo. La recuperación estaría a cargo del arquitecto Cristián Undurraga y sería financiado por la fundación Luksic ($600 millones) y el municipio ($400 millones de un crédito BID), y las obras supuestamente se iniciarían en diciembre de este año.
Hasta ahí todo bien.


Pero la Compagnia Italiana envió una carta al Departamento de Desarrollo Patrimonial y Cultural de Valparaíso avisando que desisten de el proyecto de restauración, debido a diferencias administrativas. Acusan al municipio de intentar descaradamente de dejar fuera del proyecto a CREA mediante “continuas acusaciones sin fundamento” en contra de la entidad respecto a “intervenciones ilegítimas” en el edificio, entre otros hechos maliciosos. Según ellos jamás habían visto fenómeno similar, de hostigar hasta el punto de “perder un proyecto de esta naturaleza”

Según la municipalidad el problema radica en la administración del museo , ya que las entidades privadas querían mantener el control de la corporación, que según el alcalde de Valparaíso debía ser en su 50% municipal, ya que es la ciudad la dueña del inmueble y su patrimonio pictórico.
“La exigencia de la municipalidad de detentar el control de la entidad que administrará el museo no resulta aceptable, e implica el retiro de CREA y de la Fundación Luksic del proyecto”.

Según la municipalidad el problema radica en la administración del museo , ya que las entidades privadas querían mantener el control de la corporación, que según el alcalde de Valparaíso debía ser en su 50% municipal, ya que es la ciudad la dueña del inmueble y su patrimonio pictórico.“La exigencia de la municipalidad de detentar el control de la entidad que administrará el museo no resulta aceptable, e implica el retiro de CREA y de la Fundación Luksic del proyecto”.

Parece mentira que teniendo los fondos, la oportunidad y a los profesionales sucedan estas cosas, la prioridad debiese ser un poco mas enfocada en la conservación del patrimonio, en vez de en QUIEN se lleva los créditos… la municipalidad de Valparaíso tiene una importante tarea de conservación y rehabilitación patrimonial, debiese llevarla a cabo de manera mas expansiva aprovechando la cooperación de entidades privadas capacitadas.