Ciclovía + Ciclovía = Red de Ciclovías???
Por Hernán Bianchi
Señoras y señores, ha nacido una nueva ciclovía; en Presidente Riesco entre Américo Vespucio y Alonso de Córdova. Su modesta extensión recorre unos 800 metros, y pertenece a la tipología de “ciclovía segregada”, tal como la conocida Ciclovía Pocuro, en que la mencionada vía se segrega completamente de la calzada (no así las ciclobandas, que comparten la misma superficie que los automóviles y se demarcan con una línea o solera pintada).
¿Su función? Lo más probable que sea conectar el Parque Américo Vespucio con el Parque Araucano, o al menos así se percibe. La nueva Ciclovía Presidente Riesco se suma a la red de ciclorutas (conjunto de ciclovías y ciclobandas) de Santiago, que peca quizás de ser poco extensa (unos 70 Km. para todo el área metropolitana) y en algunos casos fragmentada, pero que de a poco debiera conformar un sistema más funcional y consolidado en el transcurso del tiempo, a medida que distintas intervenciones como ésta se van ejecutando.
Los sistemas de financiamiento de las distintas ciclorutas de Santiago han sido bastante diversos, ya que los fondos han provenido en distintos casos del Banco Mundial (fondos GEF), del gobierno central o los municipios. Los procesos de planificación en torno al sistema existente son igual de variados, donde en la única instancia en que se ha podido ver una política pública importante en torno al transporte no motorizado fue en el “Programa de Transporte Urbano de Santiago” (PTUS) del 2000. En este plan, que posteriormente se modificó completamente (sería rebautizado como Transantiago, uno de los otros componentes del PTUS 2000), se contemplaba construir una red completa de ciclovías con 1.200 Km. de extensión, con un costo aproximado de 120 millones de dólares y el beneficio de movilidad absoluta para todos los ciclistas de nuestra capital.
En el caso de Presidente Riesco, la recién estrenada ciclovía parece hacerse parte de la fuerte dinámica inmobiliaria que vive el sector de los antiguos blocks de Escuela Militar, ya que la construcción de edificios de vivienda, oficinas, hotelería y otros, conformando un nuevo distrito comercial y habitacional adyacente al barrio El Golf.
Es importante mencionar también que ésta ciclovía ayudaría a seguir consolidando el Parque Vespucio como una arteria verde para el transporte no motorizado en la zona oriente de Santiago, por lo que la polémica en torno al la Autopista Vespucio Oriente sigue adquiriendo componentes.
La habilitación de nuevas rutas para los ciclistas en la ciudad y la progresiva consolidación de la red metropolitana ayudarían a ampliar la oferta para los viajes no motorizados en Santiago, ya que según la “Encuesta Origen Destino” (EOD) del 2001, los viajes en bicicleta representan tan sólo el 1.9% de la partición modal capitalina (versus un 23.5% en auto, 25.9% en micro y 36.5% a pie).
La diversificación de los viajes generados en Santiago a través los “modos verdes” es fundamental, como manera de enfrentar las crisis de contaminación aérea y acústica, congestión, costos y calidad de transporte que hemos vivido estos años. A través de la bicicleta se abre cada vez más la posibilidad de brindar mayor movilidad a sectores que no tienen acceso al automóvil o cuyos presupuestos familiares son más sensibles a los costos de transporte.
Fuente de las Imagenes:
Imagen 01: Fotografía de Hernán Bianchi e intervención de Ximena Schnaidt
Imagen 02: Hernán Bianchi