La última Tentación de Viña del Mar
Hace unas semanas la Corema de la V Región aprobó la declaración de impacto ambiental que permitirá modificar el plan regulador comunal en el sector “Petroleras Las Salinas”. Cambio que esperan hace un tiempo sus dueños (Copec, Shell y Esso) para negociar la venta del paño, que desde hace tiempo tiene a varios interesados. El terreno en cuestión, de alrededor de 15,4 ha, se ubica en una situación privilegiada de Viña del Mar, al norte de la ciudad, enfrentando en primera línea y con su mayor costado al mar. Un terreno que vale oro para los inmobiliarios y que hace ya años ha persigue el arquitecto Abraham Sennerman.
Sennerman junto a los dueños del holding Bethia formó a “Titanium Inmobiliaria” con las intensiones de realizar este proyecto, como otros, que según el mismo arquitecto serian “aportes a la renovación urbana”. Desde entonces que Sennerman ha esperado el cambio del plan regulador, tiempo en el que incluso se llevo a cabo el proyecto de la torre Titanium, en la Portada de Vitacura. El precio del paño alcanzaría los US $ 60 millones, suma que con las inversiones de proyecto se acercaría a los US $ 350 millones. Es por el alto costo, que hasta el momento, se conocen a pocos competidores para Senerman.
Para este sector el plan regulador, que debiese publicarse en el diario oficial en los primeros días de enero, contempla usos de vivienda, comercio, hotelería y espacio público, con una densidad de 1.200 habitantes por ha y con una altura máxima de 20 pisos.
El asunto de seguro suena a un Megaproyecto, uno que para los que hemos estado en el verano o largos fines de semana, de seguro asusta. El tránsito es ya, en estos períodos, casi insoportable y si contemplamos que con un proyecto como este proyecto se agregarían cerca de 18500 (según la normativa propuesta) habitantes – visitantes nuevos, el futuro de la ciudad viñamarina, al menos en periodos turísticos no me suena muy alentador.
Para manejar la incorporación de estos nuevos habitantes se contempla prolongar Av. Libertad hacia el norte, así como también construir 2 nuevas calles en sentido oriente poniente y prolongar 19 norte hacia el oriente como paseo peatonal.
Es de esperar que se evalué el impacto del proyecto en el sector, así como en la totalidad de Viña, y se piense un proyecto acorde a lo que hoy es la ciudad, para que así como dice Senerman, sea un “aporte a la renovación urbana” en el cómo el mismo Sennerman declara será “la culminación de su carrera Constructiva”.
Fuente de la Información: Revista que Pasa
Fuente de las Imágenes: flickr.com, GoogleEarth e intervención de la autora.
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