Las celebraciones de fin de año en Valparaíso
El fin de año en Valparaíso se caracteriza por dos mega eventos: los Carnavales Culturales y el Año Nuevo en el Mar.
Los Carnavales Culturales son una iniciativa que pretende consolidar a la ciudad como el epicentro de la cultura nacional, como dijo la presidenta en su discurso inaugural, la “ciudad de la alegría”. Este evento, que costó 260 millones de pesos, se realizó a través de 4 días de diversas actividades artísticas desplegadas a lo largo y ancho de la ciudad. Teatro, arte, cine, arte urbano, etc.La iniciativa de un carnaval cultural parece responder a una premisa bastante lógica, revertir el decaimiento económico de la ciudad mediante la cultura, algo bastante usual en políticas de regeneración urbana. Sin embargo, esta actividad impuesta por decreto presidencial, no tiene ninguna base en la tradición porteña…. Los artistas de mayor renombre son de Santiago, lo cual nuevamente recalca el enorme centralismo de oportunidades. En este sentido, los Carnavales Culturales debiesen ser el cierre de una actividad artística prolongada durante el resto del año en Valparaíso, arraigada en la ciudad, que quienes participen lo hagan en forma más permanente. Así mismo, que el Consejo de la Cultura y las Artes sea una instancia impulsora y de gestión artística atractiva a la inversión cultural.
El Año Nuevo en el Mar, por otro lado, es el espectáculo pirotécnico más importante de Latinoamérica. Despliega más de 28 toneladas de fuegos artificiales. Este año duro 21 minutos, y sin lugar a dudas dejo satisfechos a los espectadores, incluyendo los más de 1 millón de turistas y visitantes. El espectáculo costó 300 millones de pesos.
El contra de estos eventos es el curioso comportamiento de algunos de los visitantes, que causan indignación a los porteños, sobretodo a algunos comerciantes afectados. Los Carnavales Culturales estuvieron marcados por actos violentos y destrozos tanto así, que fue necesario aumentar la dotación policial dispuesta en un 500%. Los incidentes se registraron después del término de las actividades oficiales. Hubo 22 detenidos y estragos en diversos locales comerciales. Por otro lado, el Año Nuevo en el Mar si bien no registró actos violentos, dejó 255 toneladas de desechos en las calles, un record.
Pese a esto, el balance es positivo, no cabe duda el esfuerzo por parte de los organizadores, y la verdad es que la mayor parte del público disfruta de un espectáculo entretenido, diverso y apoteósico. Además, estos eventos inyectan un importante flujo económico a los comerciantes de Valparaíso, debido al importante número de visitantes que participan.
* Fotos: Felipe Guillón G.
