El instructivo de restricción y la percepción de la zona UNESCO en Valparaíso
La reciente visita del portaaviones George Washington causó revuelo en Valparaíso y en Viña del Mar. Más allá de sus características físicas (330 metros de largo y 80 de ancho y capacidad para más de 6000 tripulantes), lo relevante era el impacto que la visita de su tripulación generaría en el comercio local, aportando lo que se estimó serían 80 millones de pesos diarios. Sin embargo, en Valparaíso tal impacto no sucedió, esto debido a que los tripulantes del portaaviones recibieron una serie de instrucciones, dentro de las cuales, una que restringía el desplazamiento por el barrio Puerto, la zona denominada por la UNESCO Patrimonio de la Humanidad, y supuestamente, la de mayor interés turístico….
El conjunto de instrucciones fueron graficadas en un díptico que fue entregado a los “marines”. Las recomendaciones eran del orden de, es necesario establecer contacto visual para demostrar interés y sinceridad, los chilenos conversan más de cerca que la mayoría de los norteamericanos o los chilenos son mas directos sobre sus intenciones con las mujeres y así una sarta de indicaciones que dejan ver la mentalidad peyorativa y simplista que caracteriza a los norteamericanos. El problema fundamental, fue que se demarcó la zona patrimonial por excelencia de la ciudad como zona de riesgo (off limits area).
Si bien es cierto, las indicaciones de este instructivo parece no concordar del todo con la realidad, el hecho es que la medida tuvo grandes repercusiones en el comercio local, y más grave aún, el caso pone de manifiesto que el sector de mayor importancia histórica de la ciudad no genera una imagen de seguridad que la respalde.
El barrio Puerto es una zona vulnerable y hay que tomar medidas para cambiar esta imagen. El turismo es una fuente de ingreso importantísima, y su sustentabilidad depende en gran medida de la gestión de medidas de seguridad. Las zonas históricas por lo general cargan con una imagen de deterioro, y revertirla es parte de cualquier política de regeneración.
Acciones como pintar fachadas o adoquinar calles son secundarias respecto al problema socio espacial que aqueja a Valparaíso, el cual genera una percepción no solo de inseguridad sino de deterioro. Esto afecta el desarrollo comercial de una zona, que por su reconocida relevancia histórico cultural debiese ser uno de los polos mas atractivos y dinámicos dentro de la ciudad.
Fuente imágenes
Imagen instructivo de restrcción: el mercurio domingo 18 de mayo
Imagen plaza Echaurren: Felipe Guillon G.
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