Por un voto se aprueba subsidio a la locomoción
Tras la acusación de Dittborn a Ascencio, de haber vendido su voto, que provocó un conato de riña en la sala, Cortázar aclaró que los 1.200 millones de pesos para Chiloé corresponden a la traducción en pesos de los beneficios incluidos en el proyecto. Por Antonio Valencia
Un voto de diferencia entre el oficialismo y la oposición mantuvo con vida al controvertido proyecto que subsidia al transporte público de Santiago y regiones, luego de que los 57 votos de la Concertación lograran imponerse sobre los 52 de la derecha y los cuatro de los diputados ex DC presentes en la Sala, que rechazaron el texto que inyecta de manera permanente 210 millones de dólares anuales a Transantiago, y un monto equivalente para el resto del país.
El próximo martes el proyecto de ley recalará en la cámara alta, instancia que enviará el texto a la Comisión de Transportes, primero, y al de Hacienda, después.
Ambos trámites, sin embargo, no son vinculantes, por lo que a la postre será la votación en Sala del Senado la que defina si se aprueba o rechaza la “Ley Cortázar”.
Fuentes de Gobierno estiman que, semana distrital de por medio, el destino del proyecto se resolverá durante septiembre o principios de octubre, jornadas en que los votos de los senadores independientes Carlos Bianchi y Fernando flores serán decisivos.
Calculadora en mano, si la Concertación se mantiene alineada conseguiría 18 votos. Al rechazo de los 16 senadores de la Alianza se sumarán el ex DC Adolfo Zaldívar y el ex RN Carlos Cantero, generando el empate que podrían dirimir Flores y Bianchi.
Voto clave
Bianchi -que ha respaldado y rechazado fondos para el Transantiago-, viajó ayer junto al ministro del Trabajo, Osvaldo Andrade, y al senador RN Andrés Allamand a un encuentro interparlamentario.
“Espero que el ministro Cortázar no se siente a conversar a última hora, que realice un fuerte trabajo para explicarnos por qué debemos dar dinero a un proyecto que ha fracasado”, apuntó.
El senador aseguró “estar dispuesto a buscar una solución para una crisis que afecta a personas de carne y hueso”, pero arguyó que el Gobierno debe “definir conceptualmente si el transporte en Chile, y no sólo en Santiago, va a ser público, privado o mixto”. También subrayó que votará “en conciencia” y descartó que el comité de independientes actúe en esta instancia en bloque.
El sí de Ascencio
Acusado por la UDI de “vender” su voto a cambio de 1.200 millones de pesos para subsidiar el transporte marítimo en Chiloé -donde no hay micros-, el diputado DC Gabriel Ascencio concentró la controversia de la jornada, cuando interpelado en sala por Julio Dittborn, rompió en ira levantándose de su puesto para encarar duramente al gremialista, produciéndose un conato de riña que marcó gráficamente la jornada.
Lo concreto, con todo, es que el controvertido voto de Ascencio quedó asegurado la tarde-noche del martes, siendo Cortázar quién aclarara que los 1.200 millones no representan un aporte adicional para Chiloé, sino que corresponden a la traducción en pesos de los mismos beneficios descritos en el proyecto de ley. Nada adicional.
La gran batalla
Después de casi cinco horas de debate, la Cámara de Diputados aprobó ayer, por 57 contra 56 votos, un subsidio a la locomoción colectiva de la capital y regiones, que permitirá mejorar la infraestructura y rebajar o mantener, según el caso, el precio de los pasajes.
El proyecto, ingresado a tramitación en mayo de este año, se convirtió en emblema de la convivencia política, luego de que el senador Andrés Allamand interviniera para evitar la firma de un protocolo que permitiría su aprobación por amplia mayoría, acordado por el Ejecutivo y diputados oficialistas y opositores, hecho que el integrante de su propio partido Cristián Monckeberg explicó como un triunfo de “la política del desalojo”.
Apuntalada por la decisión de la UDI de dar por terminada -una vez más- la política de los acuerdos, después que el Senado rechazara la nominación de Alfredo Pfeiffer a la Suprema, lo de ayer era una tarea titánica para el Ejecutivo, que desplegó todos sus esfuerzos, entre ellos giras del ministro Cortázar a regiones, salidas a terrenos de seremi e intendentes y la intervención pública de ayer de la Presidenta, para aprobar el proyecto.
El texto pasó a segundo trámite al Senado, cuando aún no hay señales de si se mantendrá o variará la actitud opositora tras esta derrota y después que el ex presidenciable del sector Joaquín Lavín advirtiera ayer que si la Alianza quiere llegar a La Moneda deberá priorizar un discurso de consensos ante uno confrontacional.
Un subsidio muy modesto
Modesto es el monto del subsidio a la locomoción colectiva que establece el proyecto aprobado ayer en la Cámara de Diputados, si lo comparamos con el aporte estatal a este sector aplicado en otros países, sean naciones industrializadas o economías en vías de desarrollo.
En Estados Unidos, por ejemplo, en promedio, en el año 2006, los ingresos por tarifas sólo cubrieron el 38% de los costos operacionales de los sistemas de transporte público y la diferencia fue financiada mediante diversos subsidios locales o federales. Si se analizan los 50 sistemas de transportes más importantes de ese país, los ingresos por tarifas no superan el 31% de los costos operacionales de buses.
En Europa, los ingresos operacionales representan en promedio el 50% de los costos operacionales de los sistemas de transporte urbano. En lo que respecta a subsidios al pasaje escolar en Austria, el Estado provee viajes subvencionados para los estudiantes en ferrocarril, autobús y ferry (estatales y privados) y autobuses de larga distancia.
También existe un subsidio para el transporte desde y hacia la escuela en vehículos privados en áreas en las que no existe transporte público. En Madrid, en tanto, rige el abono de transporte, que consiste en una tarjeta nominativa que permite realizar un número ilimitado de viajes dentro de la ciudad a una tarifa subsidiada que varía según el tramo de edad del usuario.
En Chile, el subsidio permitirá bajas cercanas al 10% del precio del pasaje.
Taxis colectivos
Ayer y después de algunas manifestaciones en días anteriores, el presidente de la Confederación Nacional de Taxis Colectivos (Conatacoch), Héctor Sandoval, insistió en que su gremio no fue considerado en el proyecto de subsidio. En el punto 14 del protocolo, el Gobierno asume que es un tema pendiente y se compromete a seguir conversando con el gremio en busca de “un mayor desarrollo de esta actividad”.