Centenaria iglesia de Carelmapu fue cerrada por grave deterioro estructural
Cerca de US$ 1 millón cuesta restauración de este monumento nacional. Fundación que intenta su rescate ejecutó estudios con donativos de privados y extranjeros, pero falta financiar obras. Por Soledad Neira
CARELMAPU.- Un presupuesto cercano al US$1 millón requiere la restauración de la centenaria iglesia de Carelmapu. Monumento nacional, el enorme templo levantado en 1913 pertenece a la Escuela Chilota de Construcción de Iglesias de Madera, y se encuentra en un estado deplorable de conservación.
Tanto así, que no bastaron sus puntales externos que evitaban que se inclinase hacia un lado, y tuvo que ser cerrada mientras se consiguen fondos para ejecutar las obras indispensables para su recuperación y puesta en valor.
A lo menos, el cierre se prolongará por dos años, una vez que se obtengan los recursos, porque aunque los diseños están listos se requiere una larga fase de selección de maderas, cortadas en determinada época, secadas lentamente, para garantizar su óptima resistencia y duración.
Amaya Irarrázaval, arquitecta de la Corporación Cultural Identidad Patrimonial, explica que tras casi 15 años de trabajar en un diseño para restaurar el templo, logró que una fundación norteamericana y el Banco Santander financiaran los estudios.
El templo, de 770 metros cuadrados, distribuidos en tres naves, de típica arquitectura chilota, salvo por la ausencia de pórtico, alberga a Nuestra Señora de la Candelaria, una imagen que llegó a la zona hace 400 años tras la destrucción de la ciudad de Osorno.
Entre 30 mil y 40 mil de sus devotos llegan cada 2 de febrero para homenajearla hasta la tranquila caleta de Carelmapu, situada a unos 90 kilómetros de Puerto Montt, a la costa de la ruta a Chiloé.
Allí se realiza una singular procesión en el mar, desde donde la imagen es sacada en andas por buzos mariscadores y pescadores artesanales.
Amaya Irarrázaval cuenta que el estado de la iglesia patrimonial es realmente muy malo, “hay que cambiar todas las maderas, las vigas maestras estructurales del piso, las paredes”. Dice que hay varios problemas que subsanar por malas intervenciones que ha tenido, y por ello, las obras tomarán dos años.
Foto de: Sergio González