Nuevo sistema de anillos y radiales para mejorar conectividad de Santiago
(El Mercurio, 15/09/2008)
La capital deberá estar conformada por cuatro anillos que reduzcan la presión sobre Américo Vespucio y seis radiales que disminuyan el impacto sobre las carreteras de acceso a la capital de Chile para el año 2030. Por Víctor Zúñiga
“La modificación del plano regulador de Santiago no es sólo la expansión urbana de Santiago. Es mucho más”.
Así lo advierte el seremi metropolitano de Vivienda, Carlos Estévez, quien desde hace meses gestiona la propuesta del Gobierno para cambiar el Plano Regulador Metropolitano de Santiago (PRMS).
Claro, porque tal ajuste a la forma que Santiago crece implica también conversión de terrenos al interior del radio urbano, consolidación y ampliación de áreas verdes especialmente hacia la zona poniente, y una mejor conectividad vial, esencial para el desplazamiento desde, hacia y en torno a la capital de Chile.
“Y es por eso que el tema de la conectividad está en el PRMS, en donde proyectamos para el año 2030 un nuevo sistema de anillos y radiales”, explica el seremi Estévez.
Cuáles son
Y por anillos se refiere a las vías circulares que aminoren el impacto sobre la congestionada Américo Vespucio, conectando áreas de expansión y zonas industriales exclusivas entre sí, sin necesidad de pasar por el interior de la ciudad.
La propuesta apunta a tener cuatro anillos: Intermedio, Vespucio, Poniente y Orbital.
El primero o “Anillo Poniente” se extenderá desde Colina hasta Puente Alto pasando por Lampa, Pudahuel, Maipú y San Bernardo.
Estará formado por avenida del Valle, avenida La Montaña, Pudahuel Poniente del río Mapocho, conectando las autopistas a Valparaíso, San Antonio y la futura autopista a Lampa, indica.
Luego, empalmará con San José, camino El Mariscal y Tocornal.
“Algunas de estas vías serán financiadas por las empresas inmobiliarias como requisito de mitigación”, agrega Estévez.
El segundo anillo u “Orbital” será más periférico que el anterior y seguirá el trazado de la orbital propuesta por el Ministerio de Obras Públicas, conectando el camino Pie Andino con el camino Chicureo y el Camino Internacional.
“Con estos ejes, Santiago para el año 2030 quedará conformado por cuatro anillos. El Intermedio, formado por Dorsal, Las Rejas, Departamental y Pedro de Valdivia; el anillo Américo Vespucio, el anillo Poniente y el anillo Orbital”, sintetiza Estévez.
También radiales
La propuesta de cambio del PRMS también consagra radiales, que son vías proyectadas para reducir el impacto sobre las carreteras de acceso a Santiago o salida de la capital, aumentando su capacidad o generando alternativas de circulación.
En este caso se asignan fajas para proyectos que evalúa ejecutar el MOP, como la transformación de la Ruta G-16 en autopista concesionada o la ampliación a doble calzada del camino a Lonquén.
En la ruta 68 a la Quinta Región se reservarán fajas para los proyectos viales, explica Estévez, que serán construidos por las empresas inmobiliarias de las PDUC, es decir, Planes de Desarrollo Urbano Condicionado.
“Se generarán dos alternativas a la ruta 68. La primera irá por el norte y se conectará con la Costanera Norte y avenida San Pablo”, explica.
La segunda irá por el sur y se conectará con las avenidas Claudio Arrau y Oceánica, que es la caletera actual de la ruta 68, llegando a Pajaritos y la Alameda.
El seremi Estévez explicó que el sistema de anillos y radiales irá en un marco junto a las mitigaciones viales y las reservas de fajas, para lo cual el proyecto de actualización del PRMS ya fue enviado a todos los municipios de la Región Metropolitana para que hagan sus observaciones y alcances, y así evitar las caducidades previstas para el 14 de febrero de 2009 y por ende buscar las prórrogas de los trazados y fajas viales.
El PRMS debe ser visto por la Corema Metropolitana y luego por el Consejo Regional, de forma que se espera que pueda ser visto finalmente por la Contraloría General el próximo año para su promulgación y vigencia.
