Cortázar propone masiva renovación de buses
A la eliminación de los ingresos garantizados, la flexibilización de la malla y el cambio de 6 mil UF a 8 mil UF del techo de multas para caducar, se agrega un plan para reemplazar más de dos mil máquinas viejas para mejorar el servicio al usuario y el aire de Santiago. El fisco podría comprometer recursos. Por Antonio Valencia
El rediseño de Transantiago que impulsa hace dos semanas el titular de Transportes, René Cortázar, sumó nuevos capítulos vinculados al proceso de modificación de contratos: a la eliminación de los ingresos garantizados, el paso al pago por pasajero transportado y la flexibilización de la malla para reducir transbordos, se agregan el cambio de 6 mil UF a 8 mil UF como techo de multas para caducar una concesión, y un masivo plan para reemplazar buses más viejos.
A través de una minuta que consta de seis puntos, los empresarios de zonas alimentadoras conocieron a fines de la semana pasada el nuevo plan que busca reemplazar los buses “enchulados”, e incluso máquinas de la flota Euro 3 -pero sin filtro antiesmog-, que operan en la Región Metropolitana. Hoy, el sistema suma cerca de 6.400 micros, de las cuales sólo 3.100 son buses nuevos estándar Transantiago.
La fórmula propuesta por Transportes crea una nueva figura para incentivar el recambio: se trata del pago del Valor Residual (VR), índice que se establecerá en caso de que los “buses nuevos no estuvieren totalmente amortizados al final de cada concesión”, y se calculará tanto para la salida de buses viejos como para los que, aun teniendo vida útil, sean reemplazados por los operadores.
¿Quién paga el VR?
Para incentivar la inversión, se establecerá una “garantía a todo evento para pago del VR”. ¿Cómo? El ministerio podrá incorporar el pago del VR en las bases de relicitación para que el nuevo operador cancele “el VR de la concesión anterior antes de asumir la unidad de negocios”, pero si la autoridad no opta por este mecanismo, “deberá pagar el VR con arcas fiscales”.
El texto apunta a que si una empresa es caducada, el pago del VR se mantendrá, “pero será reducido en un 15% respecto del valor calculado”. La minuta propuesta, además, añade que la autoridad podrá “facilitar el acceso” del operador a “otros instrumentos que le permitan acceder al mercado financiero para la renovación de flota”.
Reducción de esmog
La nueva fórmula también apunta a “contribuir a reducir las emisiones totales” de esmog que aporta Transantiago a la ciudad, de manera que las empresas podrán “comprar y retirar del sistema los buses de su flota original” que, por antigüedad, aún tengan derecho de circular.
Los valores de estos buses con filtros antiesmog serán agregados al VR “siempre y cuando” se “muestre evidencia de la chatarrización del bus o su retiro de la flotas operativa”.