Movimiento ciudadano de Vitacura pone en jaque poder de los alcaldes
En la agrupación ciudadana Salvemos Vitacura dicen que su ejemplo ha sido visto en otros lugares y que ya están conversando con grupos de Ñuñoa y La Reina. Por Luis Concha y Jimena Saavedra
Sorprendido dice estar el abogado Rodolfo Terrazas tras obtener el 32,31% de la votación como candidato a alcalde por Vitacura. Sus más de 14 mil votos no le alcanzaron para desbancar al actual edil, Raúl Torrealba -quien fue reelecto por cuarta vez-, pero sí para hacer caer en 18 puntos la votación del alcalde, que en 2004 fue una de las mayorías nacionales, con 74,74%, y que en esta oportunidad sólo consiguió el 56,53%.
La votación de Terrazas, quien desde 2006 enfrenta a Torrealba en temas urbanísticos a través de la agrupación ciudadana Salvemos Vitacura, consolidó la adhesión de los ciudadanos a su movimiento y al discurso crítico que mantuvo contra la poca participación de la comunidad. Y lo transformó en el único candidato surgido de una organización vecinal.
“No era mito que se pueden sacar este tipo de candidatos transversales, que montan el liderazgo a través de problemas sociales, no con un discurso de cúpulas, y que terminan atrayendo a la gente”, dice el sociólogo Manuel Tironi, quien apuesta a la expasión de estas agrupaciones.
En Salvemos Vitacura dicen que su ejemplo ha sido visto en otros lugares y que ya están conversando con agrupaciones ciudadanas de Ñuñoa y La Reina. Explican, además, que la experiencia electoral les permitió conocer otras materias de interés vecinal, a las que estarán atentos durante la gestión de Torrealba, como seguridad ciudadana, salud y educación. “Lo impresionante es la votación que sacaron y en Vitacura, donde uno puede pensar que la gente alega de llena, quiere decir que los vecinos están dispuestos a defender lo que han ganado y a alinearse con plataformas de este tipo”, explica Tironi.
Patricio Herman, presidente de “Defendamos la ciudad”, afirma que “las alcaldías tendrán que entender por la fuerza de los hechos que deberán actuar más en sintonía con las demandas de los vecinos”.
Salvemos Vitacura es un buen ejemplo de las agrupaciones de intereses ciudadanos denominadas “Nimby” (del inglés not in my backyard, que se refiere a grupos organizados que defienden sus intereses), que surgió en 2006, a raíz de la oposición de vecinos a la modificación del plan regulador que permitía la construcción de 36 edificios en Escrivá de Balaguer y al que pronto se unieron vecinos con problemas similares en la Villa El Dorado y Kennedy.
La agrupación decidió solicitar un plebiscito comunal para consensuar el plan regulador de la comuna, entre los vecinos y la municipalidad. Tras recolectar 5.600 firmas en tres meses a la salida de iglesias, consiguieron la consulta -primera solicitada por vecinos- que se realizará en marzo.
Sin embargo, la idea de levantar la candidatura de Terrazas al municipio surgió en julio de 2008, cuando tras reunirse con el presidente de RN, Carlos Larraín, para solicitarle que no repostularan a Torrealba, decidieron que debían optar por un camino propio. “Llevar a alguien nuestro tenía sentido, para hacer los cambios desde dentro”, cuenta el empresario José Manuel Alessandri, quien acompañó a Terrazas como candidato a concejal y obtuvo el 9,9% de los votos.
Foto de: Felipe Fredes