Innovador proyecto rescata tradiciones del valle de Casablanca
(El Mercurio, 24/11/2008)
Generará 600 plazas de trabajo y estará consolidado en cinco años. Inversión asciende a los 10 millones de dólares. Por Paola Moreno
VALPARAÍSO.- El desarrollo inmobiliario y el rescate cultural se funden en el valle de Casablanca para dar forma a un proyecto turístico en el fundo El Porvenir, de 900 hectáreas, que representa una inversión de US$ 10 millones.
El objetivo es potenciar el atractivo rural del valle, tal como lo ha hecho el empresario Carlos Cardoen en Colchagua, y también acercar, principalmente, a los cientos de turistas extranjeros que provienen de los cruceros que arriban al puerto de Valparaíso durante todo el año.
Recreación y cultura
El fundo está dividido en 450 sitios, de los cuales 220 hectáreas serán destinadas a la construcción de casas de estilo colonial. Cada sitio tiene una superficie de 5 mil metros cuadrados.
Para los turistas se contempla habilitar una casa de huéspedes, con 25 habitaciones, los que junto a los residentes podrán disfrutar de un sendero de 7 kilómetros hacia la playa Tunquén.
Además, tendrán a su disposición un restaurante de comida típica chilena y un centro ecuestre, de 14 hectáreas y 20 pesebreras. El proyecto también incluye una telesilla, que conectará los principales atractivos del fundo.
El proyecto pertenece al empresario José Antonio Ibarra (49), quien también anhela rescatar la historia y la cultura de nuestro país por medio de la habilitación de un museo costumbrista y así “resaltar hechos históricos, como la Guerra del Pacífico o la Batalla de Placilla”. Todo emplazado en medio de viñas y lagunas, lo que permitirá la posibilidad de disfrutar de la naturaleza y de practicar deportes náuticos.
Ibarra explica que Casablanca está ubicada en un lugar estratégico, cerca de Santiago y con conexión a Algarrobo. “Tenemos una ventaja comparativa enorme, porque estamos a menos de una hora de Santiago y muy cerca de Valparaíso y Viña. Vamos a capitalizar la historia de la zona en que está emplazado el fundo y el auge inmobiliario que vive Casablanca”, explica Ibarra.
El proyecto generará 600 puestos de trabajo y, según explica, se verá consolidado de aquí a cinco años.
Ibarra no se asusta con la palabra “crisis”, porque apuesta a que en tiempos de incertidumbre financiera la inversión en bienes raíces “es la más segura y rentable”.
