El conflicto tras el abandono de dos edificios en medio de Las Condes
Este terreno, ubicado en Presidente Riesco, no ha podido ser vendido a inmobiliarias. Diferencias en la propiedad del lugar entre el Ejército y los vecinos lo tienen frenado. Por Bernardita Serrano Bascuñán
Deshabitados y desmantelados están dos de los edificios de lo que queda de la Villa San Luis en Las Condes. El problema, cuentan los vecinos, es que se han transformado en lugar de reunión de personas que se juntan a fumar y a tomar.
Los dos edificios son una verdadera isla en medio de la transitada Avenida Presidente Riesco. Además, el terreno está a pasos de uno de los sectores que más han proliferado en lo que a oficinas de lujo se refiere. Los dos blocks, deshabitados hace ya varios años, pertenecen al Ejército de Chile. Fuentes cercanas a la institución comentan que existe un “inconveniente” en el lugar porque hay una doble inscripción en la que se superponen sus terrenos con los de los habitantes de la villa. Un problema que acarrean hace ya varios años y que, según cuentan cercanos, quieren solucionar. Incluso pidieron al Conservador de Bienes Raíces que emita una resolución al respecto.
Mientras tanto, con los títulos de dominio en mano, la presidenta del comité de administración de la villa, Ana María Jiménez, asegura que la manzana completa es de las más de 100 familias que viven en los otros dos blocks del lugar, y que en 2005 el Ejército intentó que le cedieran los terrenos, cosa que no ocurrió porque “no podíamos regalar 3.300 m{+2} que nos pertenecían”, cuenta.
Pero ¿qué fue lo que pasó que hoy hay dos edificios abandonados y diferencias en la propiedad de ese terreno?
El Ministerio de Bienes Nacionales (MBN) regularizó a partir de 1999 “de forma definitiva las ocupaciones mantenidas por las familias”. Les entregaron, en forma gratuita, títulos de dominio a poco más de cien familias que no tenían su situación regularizada. Según esos documentos -y como cuentan los propietarios-, las familias son dueñas de sus departamentos pero también del lote 18-A. O sea, del terreno donde están sus edificios, los del Ejército, y de los espacios comunes.
Según los antecedentes del MBN, el problema está en los terrenos comunitarios, porque no está definido el porcentaje al que cada parte tiene derecho. Cuentan que se han buscado soluciones y que incluso el Ejército estuvo dispuesto a ceder parte importante del terreno, pero que poner de acuerdo a todos los vecinos fue imposible.
Nuevos aires
Definir qué va a pasar con los terrenos es fundamental para algunos. Sobre todo porque hay una inmobiliaria que ya comenzó a comprar departamentos. Según cuentan los vecinos, se trata de la misma empresa que desarrolló Nueva Las Condes, y que está ligada a las familias Cueto, Sarquis y Kassis, entre otras.
Lo cierto es que Felipe Gilabert, de la empresa Proyecta Gestión, está en negociaciones con varios propietarios. Según los vecinos son cerca de 70 las familias que ya han firmado para vender sus departamentos, según cuentan, a $100 millones cada propiedad.
Mientras hay algunos que quieren vender, hay otros que se niegan a dejar el lugar donde han vivido por más de 30 años o están a la espera de una mejor oferta. “Desde el año pasado que están ofreciendo comprar y hay vecinos que ni se miran”, cuenta una vecina que aún no ha querido vender. Otra vecina que ya firmó los papeles asegura que ella se quiere ir porque “el costo de vivir en Las Condes es muy alto. Aquí todo es más caro”.
Así nació la Villa San Luis
El conjunto habitacional fue entregado como solución habitacional por la Corporación de la Vivienda a unas mil familias en 1971, cuentan algunos vecinos.
Una de las beneficiadas por esa entrega fue Ana María Jiménez, quien vive en el lugar desde ese año, y que hoy es una de las personas que reside en lo que queda de la Villa San Luis. Un cartel pegado en la puerta y una libreta en la que tenía que depositar 530 cuotas eran la muestra de que era propietaria. Como si fuera ayer, en una carpeta aún tiene todos los documentos guardados.
Sin embargo, según el Ministerio de Bienes Nacionales, el año 1972 la Corporación de Mejoramiento Urbano firmó un convenio con el Ejército. Le entregó los departamentos de la Villa San Luis y a cambio, el Ejército, debía devolver el mismo número de viviendas en otro lugar. La mayor parte de las mil familias fueron trasladadas, pero del lote 18 -lo único que queda hoy de la Villa- hubo familias que se quedaron en el lugar.
En 1988, el Serviu Metropolitano donó al Fisco seis lotes de terreno donde se emplazaba la Villa San Luis. Ese mismo año fueron traspasados al Ejército. Pero en 1993 se modificó la superficie destinada y se dejó fuera de la propiedad a los blocks 16 y 17 en los que hoy viven 116 familias. El año 2000 Bienes Nacionales entregó a 104 familias, de forma gratuita, los títulos de dominio.
En 1996 el Ejército vendió su terreno en más de US$ 80 millones, a la inmobiliaria que construyó Nueva Las Condes.