Independencia busca renovar los entornos del Hipódromo y del estadio Santa Laura

(El Mercurio, 23/02/2009)

Municipio quiere proyectos inmobiliarios y evitar que habitantes sigan emigrando. Por Rodrigo Silva

En las últimas dos décadas, el 16% de los habitantes de Independencia han emigrado a otras comunas de Santiago, y el 8% de las casas se han transformado en bodegas o almacenes.

Por diversos motivos, a la gente no le entusiasma mucho vivir ahí. El municipio reconoce el problema y frente a ello está preparando el primer plan regulador propio de la comuna que, junto con ordenar las alturas máximas de construcción y proteger las zonas típicas, busca atraer proyectos inmobiliarios para renovar los deteriorados barrios que rodean sus lugares emblemáticos, como el Hipódromo Chile, el estadio Santa Laura, el sector de los hospitales y la Facultad de Medicina de la Universidad de Chile, entre otros.

Francisco Romero, director de la Secretaría Comunal de Planificación de Independencia (Secpla), explicó que la creación del primer plan regulador se basa en que “la comuna se creó en 1991 con terrenos de Santiago, Renca y Conchalí, y conservó las normas urbanas de éstas, por eso es que no hay un orden claro y actualmente no hay límites para las edificaciones en altura”.

“Además -agregó- la población ha ido emigrando a otras zonas y el medio construido se ha ido deteriorando”.

“Hay zonas a muy mal traer, como el perímetro entre las calles Gamero, Independencia y Santa María, en donde viven hacinados en pequeñas habitaciones miles de inmigrantes, con el consiguiente riesgo sanitario o de incendios”.

También se busca proteger con alturas bajas los barrios que han sido declarados zonas típicas, como Los Castaños, que alberga casas construidas por el renombrado arquitecto Luciano Kulczewski.

Romero detalló que el primer paso es “generar la norma y luego mejorar la vialidad, extendiendo calles (para lo cual se tendrán que hacer expropiaciones) y ensanchando otras”.

A partir de marzo está planificada la presentación del proyecto a las juntas de vecinos, así como el ingreso a la Corema y el Ministerio de Vivienda para las evaluaciones correspondientes.

Municipio quiere más ingresos

Independencia cuenta con un presupuesto anual de 7 mil millones de pesos. De éstos, $1.500 millones provienen del pago de patentes comerciales, $1.300 millones del Fondo Común Municipal y cerca de 700 millones por el pago de contribuciones.

El director de Secpla explicó que la apuesta del municipio “es obtener más ingresos no a través de los permisos de construcción, sino por cobro del impuesto territorial de viviendas de buena calidad, es decir, departamentos de más de 890 UF (18 millones 780 mil pesos), ya que bajo ese valor las viviendas no pagan impuestos. El 40% de ese tributo va para el municipio y el 60% para el fisco”.

Lo que se busca es generar un ingreso permanente para el municipio, y que la llegada de familias jóvenes motive un auge del comercio.