Economía y cambio climático
(El Mercurio. 23/06/2009)
Señor Director:
¿Saben lectores de dónde viene la energía eléctrica de su casa? Probablemente lo suponen. Pero si estuviéramos en Londres, no sólo lo sabríamos, sino que incluso podríamos elegir que venga de proyectos de energías renovables. Es que para los londinenses el problema del cambio climático ya no les es ajeno, sino que cotidiano: está en lo que comen y donde viajan. Es el reflejo no sólo de la magnitud del problema, sino de cómo gobiernos, empresa y sociedad están reaccionando en países de mayor desarrollo.
La respuesta del mundo empresarial ha sido mayor que la esperada. Setenta billones de euros estimados para el mercado del carbono en 2008 son prueba de ello. Pero los esfuerzos no quedan ahí. En su visita oficial a Chile, el Príncipe Carlos destacó el rol del UK Corporate Leaders Group, donde las mayores empresas de Inglaterra, entre otras funciones, analizan cómo dar un vuelco creativo a la amenaza del cambio climático. Buscan posicionarse al frente del mercado y dar soluciones que también signifiquen un desarrollo de sus propios negocios. Es así como el 60% del mercado del carbono no pasa por Nueva York o Tokio, sino por Londres.
Hasta hoy en Chile el debate ha girado principalmente en torno a los créditos de carbono y se ha discutido poco de los posibles impactos que tendrá el cambio climático en las operaciones de las empresas y, consecuentemente, en el bienestar del país. En su calidad de país exportador, Chile está expuesto a mercados más sensibles, donde existe una creciente demanda por productos bajos en emisiones. Del mismo modo, Chile postula a ser parte de la OCDE, la cual ya declaró la voluntad de que los países miembros tomen compromisos de reducción de emisiones de gases de efecto invernadero. El anticiparse a los problemas y ser proactivos frente al tema es de real importancia para la empresa chilena hoy.
Debemos aceptar que el cambio climático no es un tema alejado de nuestras realidades, sino que tendrá impactos directos e indirectos en las operaciones de las compañías. Con inteligencia y creatividad nuestros mercados pueden incorporar soluciones razonables, mesuradas y económicamente viables que conviertan esta amenaza en una oportunidad para el país.
Arturo A. Errázuriz
Presidente Comité Cambio Climático
Cámara Chilena Británica de Comercio
Director Regional EcoSecurities