La escasez de agua será la principal señal en Chile
(El Mercurio. 18/08/2009)
Lorena Guzmán H.
“En los últimos 30 años de este siglo habrá entre 12 y 14 sequías”, asegura Sebastián Vicuña, ingeniero civil industrial y director ejecutivo del Centro de Cambio Global de la Universidad Católica.
Desde marzo, biólogos, ingenieros, agrónomos, economistas y expertos de instituciones de gobierno están elaborando un estudio que dará cuenta de los efectos que el cambio climático producirá en nuestro país en los próximos 100 años. El panorama es desalentador si no se toman medidas, aseguran.
Vicuña presentó el avance del informe -que será dado a conocer en octubre por el gobierno- la semana pasada en el seminario “El cambio climático y sus efectos en el agua”, organizado por la Cámara Chileno Británica de Comercio.
“Los principales impactos van a estar asociados a la disminución de la productividad y de los recursos hídricos para la generación hidroeléctrica”, específica el científico. Las hidroeléctricas, adelanta, tendrán 30% menos de agua para producir energía.
La Región Metropolitana, por ejemplo, depende mayormente de las lluvias para tener agua potable. El glaciar Echaurren (en la cuenca del Maipo) es sólo un respaldo cuando hay prolongadas sequías, pero si la lluvia disminuye constantemente éste tampoco dará abasto. “Tampoco tenemos napas subterráneas posibles de explotar”, advierte el ingeniero.
En el norte del país, habrá que hacer aún más eficiente el manejo de las aguas subterráneas porque el alza de las temperaturas aumentará la evaporación de las fuentes superficiales de agua, detalla el informe.
El sector agrícola, explica Vicuña, se enfrentará a situaciones ambiguas: “Ciertas regiones se verán beneficiadas, pero otras, en las que los cultivos ya están funcionando en el umbral de la temperatura, no podrán superar el cambio”.
El estudio considera para sus proyecciones en Chile que el aumento promedio será de 5 grados.
En el caso de las vides productoras de vino, ejemplifica el experto, su territorio literalmente emigrará al sur. La producción de la VI Región hacia el norte decrecerá a tal nivel por la falta de agua que no será rentable. En cambio, el paisaje desde la VII Región al sur se llenará de viñas.
“Esto además implicará movimiento de instalaciones y pérdida de trabajo”, detalla el experto. En el caso del trigo, advierte, disminuirá su producción en todo el país.
En los primeros treinta años de este siglo, explica Sebastián Vicuña, no se apreciarán estos cambios. Por eso es importante precisar los efectos del cambio climático en Chile. “Habrá que cambiar la institucionalidad y tomar medidas políticas para poder mitigar las eventuales consecuencias”, advierte Vicuña.