Energía P2P y la Tercera Revolución Industrial
El sistema para compartir archivos P2P (cliente-cliente)significó un antes y un después en la manera como se distribuían las descargas de contenido por internet. En días en que para bajar a un archivo era necesario conectarse directamente a un servidor “en alguna parte del mundo” y esperar a que el contenido se descargase (sistema “servidor cliente” ), fue quedando atrás ante un modelo que prometía una mayor eficiencia en la transferencia de archivos. Un sistema “servidor-cliente” funcionaba ok hasta que muchas personas más se conectaban al mismo servidor, haciendo más lentas las descargas para el público general y colapsando los recursos del servidor remoto.
Una red P2P tiene la ventaja que al agregarse más clientes a la red la eficiencia no empeora sino que, por el contrario, se hace más eficiente. ¿Cómo es posible? Si quiero descargar algo de Japón tengo que traer los datos desde Japón, pero si aquí en Chile alguien ya los tiene, es mucho más eficiente que “se lo pida a él” que traerlo desde Japón, ¿queda más o menos claro?
Qué tiene que ver todo esto con Energía y una Tercera Revolución Industrial, despúes del salto.
Hace poco me topé con un interesante artículo en Manzana Mecánica donde reflexionaban acerca del aporte de Jeremy Rifkin y sus planteamientos acerca de un nuevo modelo económico. Bien, la palabra “modelo económico” está muy de moda por estos lares producto de la campaña presidencial, la virtud de Rifkin es plantear verdaderamente un nuevo modelo a través de la reestructuración de un bien cada vez más escaso y preciado: la energía.
Principalmente reconoce que estamos ante una suma de crisis globales, las cuales no pueden solucionarse por sí solas, requiriendo una acción conjunta y global que permita no sólo superar las adversidades sino que salir mejor parados después de éstas.
(En estos momentos) “Se dan tres crisis (…): la económica, la energética, el cambio climático y la agricultura. Es una tormenta perfecta. Nos hemos basado en la geopolítica de las naciones-estado, que compiten por la energía y los recursos naturales, que no están en todas partes. Por ello requieren enormes inversiones militares para protegerlos y de capital para gestionarlos. Son modelos centralizados que han creado modelos de negocio centralizados. Hemos de ir hacia la política de la biosfera y pensar como una especie que comparte con otras una misma biosfera.”1
Es aquí donde entra en juego el modelo P2P. La actual concepción de los recursos energéticos se basa en una red en las que varias centrales energéticas se conectan entre sí para generar una red mayor de distribución eléctrica la cual es administrada antes de llegar a nuestros hogares. Bajo este esquema, hay nodos productores (servidores) y nodos consumidores (clientes). Podría asimilarse que corresponden a la segunda figura del gráfico superior.
Sin embargo en una red P2P “pura” todos los nodos son a su vez clientes y servidores al mismo tiempo, no existiendo una jerarquización entre ellos, ninguno es más importante que otro e indispensable para que la red funcione. No así en el sistema anterior en que basta la caída de una central o nodo jerárquico para que toda la red, de distribución eléctrica en este caso, colapse. La presencia de muchos pequeños actores genera la redundancia necesaria para que el sistema siga funcionando a pesar de posibles fallos simultáneos de la red. Sería el caso del último gráfico de la imagen superior.
¿Cómo se traduce esto en nuestras ciudades?
Si se sigue la tendencia en cuanto al objetivo de ser cada vez más eficientes en el uso y consumo de la energía, esto acaerrá también un cambio en el modo en el que ésta es generada. Tomando el caso de HydroAysén, no es posible bajo este concepto de eficiencia que energía generada en la región de Aysén sea para abastecer hogares e industrias a más de 2.000 km2 de distancia en la Región Metropolitana.2
Lo que plantea Rifkin en este sentido, es la conversión de los edificios actuales a plantas de energía renovable, mediante paneles solares, turbinas de viento y otras tecnologías que están naciendo día a día. En lo que sería el primer punto o camino en pos de la Tercera Revolución Industrial basada en la producción limpia y descentralizada de la energía.
El segundo punto tiene que ver con el problema general de la energía y que aqueja fundamentalmente a las ERNC: el sol no brilla siempre y el viento no sopla constantemente. Es aquí donde entra la segunda vía de cambio o revolución la cual incorpora el almacenamiento de la energía.
Para Rifkin, uno de los caminos propuestos es el de generación de hidrógeno como combustible con el excedente de energía. Otros caminos podrían ser inciativas de recarga de baterías eléctricas, verdaderas “granjas” que permitirían, por ejemplo, autos eléctricos en los que no recargáramos las baterías sino que las cambiáramos por otras “con carga” en estaciones especializadas. También en un modelo descentralizado de energía (Ver por favor el caso de Better Place: El futuro de los autos eléctricos)
“También podemos hacer que la red de distribución energética sea inteligente, la llamaremos la inter-grid. En un futuro no muy distante, millones y millones de personas generarán energía en sus edificios, la almacenarán en la forma de hidrógeno, y la distribuirán peer-to-peer, tal como los medios digitales e Internet.”
Los 4 pilares3
El plan para la tercera revolución industrial se basa en 4 pilares:
- Energías renovables: el sol, el viento, los ríos, las olas del mar, y la biomasa. Actualmente las energías renovables son una fracción pequeña, pero en aumento, de nuestra generación energética.
- Los edificios como plantas de energía: los edificios (industria, comercio y habitación) consumen del 30% al 40% de la energía; las tecnologías actuales permiten la instalación de sistemas eficientes de generación de energía solar y eólica para primero reducir la dependencia energética de un edificio y después generar un excedente.
- Hidrógeno y otras formas de almacenamiento: las energías renovables son intermitentes y por lo tanto se requiere de mecanismos de almacenamiento. Cuando la energía es abundante, es posible utilizar electricidad para obtener hidrógeno del agua y usar el hidrógeno como un medio de almacenamiento. Hay otros mecanismos de almacenamiento disponibles actualmente.
- Redes inteligentes: las nuevas tecnologías de comunicación hacen posible que la red de energía sea inteligente y pueda gestionar una gran cantidad de nodos de generación y consumo de energía.
Rifkin lo resume así:
“Así se crea una red con millones de edificios que generan una pequeña parte de la electricidad que se intercambia de punto a punto, como con Youtube. Hablo de crear un capitalismo descentralizado en el que todo el mundo participe. Eso requiere cambios sociales y de mentalidad. Los jóvenes están preparados para ello por la descentralización del conocimiento a través de internet.” (( Fuente: Ecoticias.com 22/06/09 ))
- Fuente: Ecoticias.com 22/06/09 [↩]
- Ver Bases Convocatorias Aysén Transmisión [↩]
- Texto extraído íntegramente de Manzana Mecánica [↩]
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