Carta – Bosques y cambio climático
(El Mercurio. 06/12/2009)
Señor Director:
Cuando está por comenzar la reunión cumbre de Copenhague, para negociar un acuerdo sobre la reducción de las emisiones de gases de efecto invernadero que sustituya al Protocolo de Kyoto de 1997, vemos con interés como 98 jefes de Estado y de gobierno han confirmado su presencia, reflejando con ello la importancia que tiene en el mundo este tema.
En este marco, los bosques tomarán un papel preponderante, ya que el Panel Intergubernamental del Cambio Climático (IPCC, por sus siglas en inglés) ha señalado como ejemplo de actividades de mitigación de este fenómeno, en el ámbito forestal, a la forestación, reforestación y reducción de la deforestación; el manejo de bosques, la utilización de productos forestales para la obtención de biocombustibles que sustituyan a los combustibles fósiles.
El crecimiento de la superficie de bosques es un aspecto de gran relevancia, si se considera que las emisiones por deforestación y degradación de los bosques en el mundo dan cuenta de aproximadamente el 20% de las emisiones globales de CO {-2} , fundamentalmente en países menos desarrollados. En ese sentido, según reportes de FAO, Chile y Uruguay son los únicos países sudamericanos que han incrementado su superficie forestal, con 57 mil y 19 mil hectáreas anuales, respectivamente, en el período 2000-2005. En Chile, este incremento se debe a las plantaciones forestales, que en su gran mayoría se establecen sobre suelos degradados o erosionados. Como además todo lo que se cosecha es reforestado, la fijación de carbono del recurso resulta adicional y permanente.
A miles de kilómetros de distancia de la capital danesa, en nuestro país, mucho tenemos que decir respecto de estas preocupaciones internacionales, con una existencia de 15,9 millones de hectáreas de bosques, de los cuales 2,3 son bosques plantados productivos y 13,6 millones corresponden a bosque nativo. De acuerdo con estimaciones realistas, nuestros bosques en conjunto almacenan alrededor de 3.212 millones de toneladas de CO {-2} . Por otra parte, un estudio reciente de la Universidad de Chile señala que el sector forestal mitigó el 56% de las emisiones totales del país en 2005, capturando más de 42 millones de toneladas de CO {-2} equivalente, mientras las emisiones netas del país alcanzaron las 73 millones de toneladas.
Esta realidad, reconocida por el Gobierno, ha quedado manifestada en el envío a la Convención Marco sobre Cambio Climático de las Naciones Unidas de un documento que destaca el papel de la industria forestal en la captura y almacenamiento de carbono, a través de los bosques plantados y la elaboración de productos de madera.
Un elemento importante de destacar es que el carbono que almacenan los árboles no se libera al fabricar productos con madera y papel, sino que queda retenido en ellos. Finalmente, cuando los productos terminan su ciclo de vida y se degradan, se libera el mismo carbono que fue capturado mediante fotosíntesis durante el crecimiento del árbol, razón por la cual la madera es considerada como material carbono-neutral. Además, subproductos de la industria forestal, tales como aserrín, corteza y otros, son utilizados como una fuente renovable de combustible. Son estos factores los que hacen que la huella de carbono tenga un balance positivo para el sector forestal; es decir, su captura es mayor a las emisiones.
Adicionalmente, la madera, como producto de construcción, a partir de una materia prima que se desarrolla secuestrando carbono de la atmósfera, requiere mucho menos energía para su producción y transporte en comparación con otros materiales como cemento o acero, además de ser un mejor aislante. Esta última propiedad permite que las viviendas de madera generen importantes ahorros de energía en calefacción, lo que también tiene beneficios desde esta mirada.
Es indudable que el recurso forestal chileno constituye un actor importante en el aporte que el país realiza a la lucha contra el calentamiento global, mediante la captura de CO {-2} , lo que ha sido reconocido en distintas instancias.
JOSÉ RAFAEL CAMPINO
Presidente Corporación Chilena de la Madera
