China se enfrenta con EE.UU. y Europa en cumbre climática
(La Tercera. 10/12/2009)
En 2010 China será la segunda economía del mundo después de EE.UU. y tan grande ha sido su expansión, que el “gigante asiático” se ha transformado en el principal sostenedor de la deuda estadounidense. Pese a ello, en la Cumbre del Clima de Copenhague, los chinos se han situado en el bando de los países en vías de desarrollo y han lanzado duras críticas contra las “naciones ricas”. Según Beijing, son esos países los que deben recortar sus emisiones contaminantes, dada su “responsabilidad histórica” como causantes del cambio climático. A su vez, Washington exigió ayer a China a que se comprometa a reducir sus emisiones de dióxido de carbono en el acuerdo final de la cumbre y se opuso a que el gobierno chino acceda a las ayudas destinadas a países emergentes.
Su Wei, el “número dos” de la delegación china en Copenhague, criticó con dureza que los objetivos de reducción de contaminantes propuestos por EE.UU., la Unión Europea y Japón para 2020, que oscilan entre el 25% y el 40%, son insuficientes para detener el calentamiento global. De acuerdo con este funcionario, la propuesta de Barack Obama de reducir un 17% las emisiones en 2020, respecto a los niveles de 2005, “no puede ser vista como extraordinaria ni notable”. Además, dijo que sólo los países industrializados tienen “la obligación y responsabilidad” de recortar sus emisiones, mientras que las medidas de las naciones en desarrollo deben ser “voluntarias”. Ello, pese a que China es, junto a EE.UU., el país que más contamina en el mundo.
China ha propuesto reducir entre un 40% y 45% su intensidad energética (emisión de CO2 por unidad de PIB) en 2020 respecto de los niveles de 2005, un objetivo que EE.UU y la UE ha calificado como poco ambicioso. En ese sentido, el jefe de la delegación estadounidense, Todd Stern, dijo que su país “no firmará” un acuerdo que no refleje el compromiso chino, por considerar que, por su crecimiento económico y por el nivel de contaminación que genera, ese país no puede disfrutar de las mismas condiciones que el resto. China respondió a ese emplazamiento y dijo que podría discutir una meta para reducir a la mitad las emisiones de contaminantes para 2050 si las naciones desarrolladas se comprometen con mayores recortes e incrementan su ayuda financiera.
Críticas al anfitrión
Al mismo tiempo, la UE se lanzó en picada contra China, país al que reprochó el bloqueo de discusiones abiertas sobre la reducción de gases de efecto invernadero en los grupos de trabajo en la cumbre. En medio del enfrentamiento con Beijing, los países en vías de desarrollo reunidos en el llamado Grupo de los 77 criticaron a Dinamarca como país anfitrión, cuestionándolo por representar los intereses “unilaterales” de algunos Estados. También Brasil expresó su “malestar” ante el documento elaborado por Dinamarca que contempla mayores exigencias para los países más pobres.
Por su parte, el primer ministro danés, Lars Lokke Rasmussen, rechazó tales críticas y dijo que el borrador para el acuerdo final es un “mero papel de trabajo”. Rasmussen comentó que “existen muchos tipos de documentos de trabajo. Pero Dinamarca aún no ha presentado ni una sola propuesta, eso seguro”.
La Conferencia de Copenhague, iniciada el lunes y que terminará el 18 de diciembre, debería llegar a un acuerdo global vinculante sobre cómo enfrentar el calentamiento global que sustituya al Protocolo de Kioto.
Republicanos lanzan dura advertencia a Obama
Pese a las expectativas que ha generado la participación de Barack Obama en la Cumbre de Copenhague, el opositor Partido Republicano anunció que varios de sus representantes viajarán a Dinamarca para decirle al mundo que el Congreso de EE.UU. se opondrá a todas las promesas que ha hecho el Presidente sobre el cambio climático.
El representante republicano, James Sensenbrenner, citado por Fox News, dijo que no le darán apoyo a Obama mientras no se ponga fin al “fascismo científico”. También, ese legislador conservador le escribió al presidente del Panel Intergubernamental sobre el Cambio Climático (IPCC) Rajendra Pachauri, para exigirle que evite que se utilicen los estudios de los científicos cuyos correos electrónicos se filtraron recientemente a la opinión pública. De esos e-mails se desprende que algunos científicos británicos habrían alterado los datos sobre el calentamiento global.
“Mr. Obama, no haga en Copenhague promesas que no podemos cumplir”, afirmó otro parlamentario republicano, Mike Pence. Hasta la ex gobernadora de Alaska y ex candidata a Vicepresidente por la fórmula republicana, Sarah Palin (en la foto), le pidió a Obama cancelar su viaje a Copenhague, previsto para fines de la próxima semana. A pesar de la oposición republicana a los planes de Obama, en Copenhague había cierto optimismo respecto de la posición que asumirá Estados Unidos. Ello, después de que la Agencia de Protección Ambiental de Estados Unidos (EPA) decidiera catalogar las emisiones de CO2 como nocivas, algo que da mayor libertad a Obama para las negociaciones.