El precio del calentamiento para Latinoamérica
(El Mercurio. 17/12/2009)
En caso de no haber un acuerdo internacional para mitigar los efectos del cambio climático, el costo para América Latina y el Caribe podría equivaler hasta 137% del PIB regional actual para 2100. Es la dramática conclusión de “La economía del cambio climático en América Latina y el Caribe. Síntesis 2009”, un informe sobre la consecuencias del fenómeno hecho por la Comisión Económica para América Latina y el Caribe (Cepal).
La investigación se basó en estimaciones y cálculos de 15 países de la región -Argentina, Belice, Bolivia, Chile, Costa Rica, Ecuador, El Salvador, Guatemala, Honduras, México, Nicaragua, Panamá, Paraguay, República Dominicana y Uruguay- con la colaboración de los gobiernos de Alemania, Dinamarca, España y Reino Unido, además de la Unión Europea, el Banco Interamericano de Desarrollo (BID), el Mecanismo Mundial de la Convención de las Naciones Unidas de Lucha contra la Desertificación y una amplia red de instituciones académicas y de investigación.El estudio, que identifica los impactos económicos del cambio climático en la región, fue presentado ayer en un evento paralelo a la XV Conferencia de las Partes en la Convención Marco de las Naciones Unidas sobre el Cambio Climático (Cop 15), que se realiza en Copenhague.
El informe proyecta que, sin acciones internacionales de mitigación, la región podría sufrir para fines del siglo pérdidas importantes en el sector agrícola y en la biodiversidad, fuertes presiones sobre la infraestructura y aumento en la intensidad de eventos extremos, que se acumularían hasta representar cifras importantes del PIB actual.
Efectos
Aunque es la segunda región mundial que menos emite gases de efecto invernadero detrás de África, América Latina y el Caribe está sufriendo los efectos del calentamiento global más que ninguna otra, según el informe.
Por ejemplo, algunas naciones tendrían beneficios temporales en sus sectores agrícolas como consecuencia de aumentos de temperatura menores a 2ºC y los cambios en las precipitaciones, aunque en el largo plazo predominarían los efectos negativos. Con un incremento de la temperatura planetaria superior a 3ºC, algunos países o regiones podrían perder hasta 30% ó 40% de su biodiversidad.
Argentina, Chile y Uruguay tendrían efectos positivos en su productividad agrícola si la temperatura aumentara entre 1,5ºC y 2ºC en el período 2030-2050. Sin embargo, si se traspasa este umbral de temperatura los efectos serán negativos.
Para 2100 se calcula que en Bolivia, Chile, Ecuador, Paraguay y Perú las tierras degradadas oscilarían entre el 22% y 62% del territorio. También disminuirá la disponibilidad de agua, sobre todo en América del Sur.