Alcalde de Buenos Aires quiere convertir a la capital argentina en una ciudad más “verde”

(El Mercurio. 18/12/2009)

LAURA ROCHA La Nación

buenos airesScreenHunter_179 Dec. 21 20.22Humanizar las ciudades, alentar el desarrollo del transporte público e impulsar formas alternativas de transporte son algunos de los acuerdos a los que se llegó en una reunión mundial de alcaldes, esta semana en Copenhague.

El jefe del gobierno porteño (alcalde), Mauricio Macri, presentó el plan para mitigar los efectos del cambio climático. “Es primordial que las ciudades tengan acceso a fuentes de financiamiento internacional. Debemos asegurarles a nuestros ciudadanos una calidad de vida sustentable”, dijo Macri durante su exposición ante el Consejo Mundial de Alcaldes por el clima, cita realizada en forma paralela a la cumbre del clima.

Los ediles coincidieron en señalar que muchas ciudades, incluso varias de Estados Unidos, nación que no adhirió al Protocolo de Kyoto para reducir emisiones contaminantes, avanzan más rápido que los países en cuanto a las propuestas.

En ese sentido, Macri planteó reducir en un 30 por ciento los gases de efecto invernadero que se generan en la ciudad de Buenos Aires para 2030. Entre los planes para concretar la meta están el cambio completo de luminarias en los edificios públicos de la ciudad, el reemplazo de las luces de los semáforos por tecnología LED y el uso de buses híbridos en las calles porteñas.

Una de las medidas más destacadas fue la de impulsar el uso de la bicicleta. Incluso existirá, al igual que en París o Berlín, el sistema de “bicing”. El primer paso será diseñar para el año próximo una red de ciclovías en Retiro, Once y Constitución, y que llegará hasta Plaza Italia. La promesa oficial asegura que a fines de este año habrá 25 kilómetros y que, durante 2010, se construirán otros 60 kilómetros.

Esta medida forma parte del Plan de Movilidad Sustentable, que también impulsa el desarrollo de buses articulados, que circularán por la avenida Juan B. Justo, y el uso de buses híbridos.

Para 2030, Buenos Aires se plantea una meta de reducción para el transporte del 37,5 por ciento de sus emisiones mediante la ampliación de la red de metros, buses y autos híbridos y eléctricos, y mejora en los modos de conducción y en la verificación técnica vehicular.

Escenarios futuros

Los escenarios futuros para Buenos Aires muestran un aumento en la ocurrencia de precipitaciones mayores a 60 milímetros en 60 minutos y 100 milímetros en 24 horas, y un ascenso del nivel medio del mar -que provoca la crecida del río- de 0,6 metro.

“El agravamiento de inundaciones afectaría a cerca de 1,5 millón de habitantes radicados en ambas márgenes del río Matanza Riachuelo y en las cuencas de los arroyos al norte de la ciudad y del río Reconquista. Es por eso que proponemos evaluar la construcción de defensas costeras para evitar los altísimos costos de reubicar poblaciones con riesgo de inundación, además de desarrollar un sistema de alerta hidrológico”, explicó Graciela Gerola, presidenta de la Agencia de Protección Ambiental, quien viajó a Dinamarca con Macri.

El panel convocado para discutir sobre cómo pueden los alcaldes del mundo acelerar el cambio hacia una Ciudad Verde contó con la participación del alcalde de Nueva York, Michael Bloomberg; de la alcaldesa de Copenhague, Ritt Bjerregaard, y del jefe de gobierno del Distrito Federal de México, Marcelo Ebrard Casaubon.

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60 km

de ciclovías se construirán en Buenos Aires durante 2010 para fomentar formas alternativas de movilización.

Buses ecológicos hechos en el país

Durante enero comenzará a circular por las calles de Buenos Aires una nueva flota de buses ecológicos. Se trata de máquinas híbridas, y son los primeros vehículos de transporte público hechos con tecnología no contaminante en Argentina.

Desde los primeros días de 2010, el prototipo recorrerá las calles porteñas, sin pasajeros, para que los habitantes de los distintos barrios lo conozcan. Después, 120 unidades ecológicas irán reemplazando a las actuales máquinas, en un plazo máximo de un año y medio.

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Los vehículos híbridos funcionan con energía térmica y eléctrica: tienen un motor alimentado con diésel y otro eléctrico. Al frenar, el motor eléctrico actúa como generador y permite la recuperación de parte de la energía cinética del vehículo para almacenarla en el “banco” de baterías, para mejorar la eficiencia. Así, en los puntos de ascenso y descenso de pasajeros, las baterías eléctricas se recargan.