Emergencias Técnicas de Habitabilidad post Terremoto
Tras ocho días de la catástrofe que abatió a más de siete regiones de nuestro país, han surgido una serie de soluciones iniciales e inmediatas que se enmarcan en extensos procesos necesarios para renovar y restablecer las condiciones de habitabilidad. En este escenario de inestabilidad, miles de familias desalojan sus viviendas a la espera de asesoría técnica en caso de reparaciones, demoliciones, relocalización o simplemente el aviso de que no hay riesgos en volver a habitar sus viviendas. En localidades afectadas por tsunami en las regiones del Maule y Biobío como Iloca, ya se está analizando la posibilidad de una relocalización sobre la cota mínima de seguridad. Mientras dentro de la Región Metropolitana, destacan conjuntos como la Villa Portales, donde cientos de familias se encuentran desalojados hasta obtener el informe de evaluación sobre la habitabilidad de sus viviendas.
Se trata de un periodo de acción técnica y operación estratégica, determinante a distintas escalas de afectación: tanto a nivel habitacional como en el futuro desarrollo y renovación de distintas localidades de nuestro país.
Redes de Acción Inmediata: Catastros de Daños
Como todo sismo de alta intensidad, viene acompañado de réplicas que han pronunciado los daños en los días posteriores a la catástrofe: las fallas estructurales han aumentado en el tiempo el número de desalojos y de solicitantes por evaluar la habitabilidad de sus viviendas.
Quienes han sufrido daños de importancia en sus viviendas tienen diversas vías para ingresar al sistema de catastro de daños: acudir a su municipalidad respectiva o a través de distintos medios web como Plataforma Arquitectura. Sin embargo, la revisión técnica de emergencia no se ha limitado a revisión de viviendas, sino que cualquier tipo de construcción o infraestructura que pueda significar un riesgo para las personas.
El trabajo de catastro es una respuesta inmediata para tomar las precauciones necesarias según el grado de afectación que tiene el inmueble. La Dirección de Obras Municipales con el apoyo de profesionales deciden tras un diagnóstico si la vivienda debe ser demolida, puede ser habitada o qué tipo de reparaciones deben realizarse.
Resultados Iniciales
En tres días de catastro dentro de la Región Metropolitana, 480 correspondientes a un 20% de las 2.338 construcciones inspeccionadas, se declararon inhabitables. Los desalojos se demandaron tanto para aquellos casos donde se afirmó la necesidad de demoler completamente los inmuebles como para los que deben desmantelar sólo sus sectores más críticos. En las 1.710 construcciones restantes no se encontraron fallas mayores que ameritaran su abandono.
La siguiente imagen grafica las cifras preliminares del primer catastro de la región, señalando las construcciones desalojadas:
Fuente: minvu, a través de emol.
Soluciones Inmediatas: Desalojos colectivos, Nuevos Escenarios
Un sinnúmero de familias vive una situación similar a los últimos acontecimientos en la Villa Olímpica. En estos momentos, la Unidad Vecinal Villa Portales está rodeada en las zonas proyectadas para uso comunitario por carpas e improvisadas instalaciones tras ser desalojados durante el viernes y ayer por orden de la Municipalidad de Estación Central. Ingenieros de la municipalidad y del Centro de Investigación, Desarrollo e Innovación de Estructuras y Materiales (Idiem) analizan el edificio y elaboran un informe para determinar la habitabilidad de los departamentos de los blocks 1, 2 y 4. Las inseguridades frente a los daños visibles, que se replican en distintos puntos de la ciudad, han sembrado un temor colectivo: una serie de habitantes espera la respuesta de los especialistas mientras otros aseguran no volver a vivir en el histórico conjunto.
Izquierda: Campamentos Villa Portales; Derecha: Sitio próximo a departamentos en Conchalí
Más hacia el sur, la seguidilla de localidades costeras en el Maule y el Biobío fueron devastadas no sólo por el azote del terremoto, sino también por el tsunami debido al riesgo de existir franjas de construcciones a pocos metros de la playa. Sus habitantes esperan la evaluación y levantamiento de estos sectores que revelará posibilidades de relocalización. El gobierno encargó a la Universidad Católica un estudio y diseño de Plan Regulador para toda la zona costera de la región, que determinará una nueva estructura urbana. Sin embargo, se trata de poblados altamente establecidos en el tiempo en una interdependiente proximidad al mar, principalmente debido a su tradición pesquera, por lo que cualquier decisión de reubicación debe ser óptima y no significar una amenaza en términos sociales y de seguridad.
Durante estos procesos de análisis técnico y operativo se espacializan acciones de emergencia determinantes en el futuro desarrollo de distintas localidades en el país. Esta primera instancia colectiviza una serie de casos, guiando a cientos de habitantes en las medidas a tomar según la evaluación de sus casos en particular: retornar a sus viviendas, efectuar las reparaciones correspondientes o en casos más severos, relocalización de las viviendas, generando en algunas zonas altos impactos en la estructura y composición urbana. Este ánalisis generará posibles nuevos escenarios de mayor escala, por lo que en este material es fundamental un trabajo estratégico que sea capaz de sostener criterios de seguridad sin sacrificar las posibilidades de un desarrollo urbano de calidad.