Resultado Concurso de Ideas Muelle Vergara
*Colaboración Sebastián Jordana
Recuperar la calidad de espacio público del Muelle Vergara de Viña del Mar fue la motivación de este “Concurso de Ideas” organizado por la concejalía de Andrés Celis de Viña del Mar y el Hotel San Martín de dicha ciudad. El concurso sería originalmente resuelto y publicado el día del terremoto del 27 de febrero, retrasándose involuntariamente por un mes la entrega de los resultados. Fueron recibidas más de 20 ideas de proyecto, las cuales fueron evaluadas por un jurado compuesto por técnicos, autoridades y empresarios, dando como resultado una interesante discusión sobre el borde costero, el patrimonio y la viabilidad de la tan ansiada recuperación.
Conocida hace unos años la necesidad de realizar trabajos que garanticen la estabilidad y seguridad del muelle (los conocidos MM$ 3.000 indicados por la DOP), la intervención conserva la estructura existente y la grúa del lado sur. Como paso siguiente a estas obras de reparación (aún no definido su inicio por parte de los actores vinculados: el gobierno local (Municipio de Viña del Mar) el gobierno central (MOP, Concesiones y Directemar) o inversionistas locales) se pretende con este concurso y debate conocer las posibilidades de su revitalización, invitando a la ciudadanía a la confección de propuestas.
El proyecto que recibió el 1er lugar fue diseñado por los arquitectos Marcelo Carvallo y Alberto Texidó. Pueden ver más imágenes y descripción de la propuesta, después del salto.
En lo particular, la propuesta premiada plantea espacios públicos flexibles y multifuncionales, intentando garantizar las circulaciones y vistas distantes, las que rodean los núcleos de servicios, destinados a actividades de turismo gastronómico (bulevar del primer nivel). Liberando el cabezo que cada invierno es afectado por fuertes oleajes y vientos, quedando liberado para actividades diversas, como las festividades de año nuevo en el mar o actos culturales.
En un segundo nivel, se plantean terrazas sombreadas por una cubierta flexible y resistente a la intemperie, que hacen entrar al muelle hacia la ciudad, con servicios turísticos mas exclusivos y una sala de convenciones en el lado poniente, con una vista al mar desde el interior, que permite ser reversible con tal de proyectar imágenes hacia el exterior, aumentando las posibilidades de uso de esta gran plaza exterior del cabezo. En general el muelle garantiza el acceso público a la totalidad de sus recintos, pero eventualmente puede sectorizarse para actividades puntuales especializadas.
A su vez, se refuerza la presencia vertical del muelle hacia la ciudad, con una estructura vertical que soporta la cubierta y refuerza la imagen náutica de este nuevo espacio público, marcando su ubicación a lo largo del borde costero de la ciudad, donde el mar pasa de ser un fondo a un espacio de nuevas experiencias, desde ahí habla de la “caminata en el mar” que titula el proyecto.
Finalmente, la oportunidad que este concurso planteaba, luego del terremoto y tsunami, modifica la agenda y las perspectivas de intervenir los bordes costeros hacia una inminente necesidad de legislar y modernizar sobre su correcta ocupación. Afecta a eventos de riesgo sorpresivos, que obligarán a repensar el emplazamiento de actividades permanentes en zonas de riesgo, con la adecuada planificación que permita suponer las reacciones adecuadas para las proximas sorpresas que la naturaleza nos prepara.