En Talca hay 2.400 inmuebles para demoler y sólo un tercio del comercio está en actividad
(El Mercurio, 21/4/2010)
En el casco histórico se acumulan los mayores daños, pero en la comuna hay 15 mil damnificados por la tragedia. Se han entregado 450 viviendas de emergencia, pero 1.850 familias esperan un techo. Por ahora están viviendo en carpas. Por Fredy Aliaga
TALCA.- Aunque el epicentro del terremoto que el 27 de febrero devastó el centro-sur de Chile estuvo en Cobquecura, Región del Biobío, la capital de la Región del Maule fue una de las ciudades más castigadas por el sismo. Y a 53 días del cataclismo, el casco histórico de Talca suma 2.400 inmuebles con orden de demolición y apenas un tercio de los 1.500 locales comerciales ha logrado reabrir sus puertas.
Además, 12.374 alumnos continúan sin clases, de un total de 55.600 y 17 recintos educacionales (de 144) no han normalizado sus actividades por los graves daños. El hospital colapsó y hay un severo déficit de camas.
Los 15 mil damnificados y 96 muertos de la urbe, dice el alcalde Juan Castro, indican que “Talca es la ciudad del país con más daños”. Castro está impaciente ante una normalización que se ve remota.
La necesidad de viviendas de emergencia es otra urgencia. Hay 1.850 familias que aún esperan mediaguas y hasta ahora sólo se han construido 450. En el casco histórico y en barrios periféricos de Talca es posible encontrar casi mil carpas habitadas por personas con sus casas dañadas y con miedo de habitarlas.
“Ya no quiero entrar a mi departamento, porque temo que se caiga”, dice Marta González Concha (66), de la población San Luis, quien duerme a la intemperie desde el 27 de febrero.
Quienes transitan por el centro de Talca observan el incesante retiro de escombros, que suma un avance del 40%. Cada día se sacan 5 mil m3 de material.
El presidente de la Cámara de Comercio y Turismo, Fernando Jiménez, asegura que no han recibido ayuda del Gobierno, pese a que representan el 11% de los puestos de trabajo en la comuna. Sostiene que sólo el alcalde Castro los ha apoyado demoliendo gratuitamente parte de los locales destruidos.
La demolición del Hospital de Talca sí avanza rápido. El frontis del polémico recinto hoy es sólo escombros. Tiene 260 de las 544 camas que poseía antes del terremoto. En cuatro meses más el establecimiento contará con un recinto modular de 150 camas instalado por el Ministerio de Salud, con tres pabellones y tres salas de parto.
Se espera que el Gobierno de Italia envíe un hospital modular con 50 camas en las próximas semanas. Por ahora el déficit se soluciona con 22 camas del hospital de campaña del Ejército.
En educación, el director del emblemático liceo Abate Molina -500 de sus 2.150 alumnos deben rendir la PSU a fines de año-, César López, asegura que “la burocracia ha entrabado mucho la normalización de clases. La demolición partió recién hace 15 días”. Medio millar de estudiantes deberá estudiar en salas modulares. Cuatro de estas soluciones provisorias son levantadas por los mismos profesores.
”La emergencia de Talca requiere un trato especial y las autoridades del gobierno central deben tener una mejor
claridad de lo que pasa en las comunas”.
JUAN CASTRO, Alcalde de Talca
12.374 alumnos continúan sin clases en la comuna de Talca.
260 camas de las 544 que tenía el hospital regional están operativas.
96 muertos en la capital del Maule, la cifra más alta entre las comunas afectadas.
$700 millones ha gastado la municipalidad en el retiro de escombros.
1.850 familias esperan una vivienda de emergencia y aún permanecen en carpas.
