Aseguradoras prevén pagar daños en viviendas antes de fin de año: Son 174 mil casos que totalizarían cerca de US$ 1.200 millones
(El Mercurio, 10/06/2010)
por Julio Pizarro V.
El presidente del gremio, Fernando Cámbara, agregó que apurar la liquidación de siniestros podría encarecer los costos.
Contra el tiempo está trabajando la industria de seguros para pagar los daños causados por el terremoto en casas y departamentos asegurados.
Según cifras de la Superintendencia de Valores y Seguros, al 31 de mayo, sólo un 23,47% de los siniestros de viviendas denunciados han sido liquidados, porcentaje correspondiente a 41.071 casos -de un total de 174.995- por US$ 86 millones.
El presidente de la Asociación de Aseguradores, Fernando Cámbara, señaló que ésta es una situación excepcional por la gran cantidad de denuncias que se realizaron en un corto período de tiempo, pero reiteró que las compañías están acelerando los procesos y que pagarán todo lo que corresponde.
“Lo único que pedimos es que tengan paciencia. Si no hay diferencias de criterios en las valorizaciones, la gran mayoría de los siniestros de casa-habitación van a estar liquidados antes de fin de año”, agrega el ejecutivo, quien valoriza los daños en viviendas en cerca de US$ 1.200 millones.
Cámbara agregó que una de las dificultades ha sido el bajo número de liquidadores para la cantidad de inspecciones que se tienen que realizar en los 90 días que establece la norma para liquidar los siniestros.
Según cifras proporcionadas por la SVS, hay 1.254 personas trabajando en inspeccionar los daños del terremoto pertenecientes a 188 liquidadores autorizados, de los cuales algunos ya han finiquitado todos sus casos. Por ejemplo, el estudio Rosemary & Ruiz Tagle informó que cerró sus 10.932 denuncios, 8% del total de la industria.
Sin embargo, varios de ellos han solicitado a la SVS aumentar el plazo de 90 días -desde que se realizó la denuncia- para liquidar el siniestro. Al respecto, el intendente de seguros, Osvaldo Macías, dijo que analizará los planes caso a caso.
“Actuaremos con bastante criterio, dando un mensaje de que es necesario liquidar rápido pero entendemos que hay casos justificados y tampoco queremos afectar la calidad de las liquidaciones”, explicó.
Sobre el último punto, Cámbara alerta sobre acelerar las liquidaciones, ya que un mal proceso de valorización de los daños -que es complejo- puede encarecer el siniestro, lo que significa mayor costo del reaseguro para la compañía. “Y eso va ir en desmedro de los consumidores”, finaliza el ejecutivo.