Locatarios de Plaza Ñuñoa buscan mitigar baja de ventas por obras de estacionamientos: Los trabajos frente a pubs y restaurantes comenzaron en abril y durarán un año
(El Mercurio, 05/07/2010)
por Ximena Pérez G.
Menores precios, promociones e incluso despido de personal son algunas alternativas que han debido aplicar en los recintos para “sobrevivir” hasta que se entregue la obra en superficie.
Están acostumbrados a que en la temporada invernal el frío y la lluvia ahuyenten a algunos clientes, pero este año los dueños y administradores de pubs y restaurantes que bordean la Plaza Ñuñoa suman una nueva dificultad: las obras de construcción de estacionamientos subterráneos iniciadas el 16 de abril frente a sus locales, las que, aseguran, han agudizado la baja de ventas.
Paneles de madera de casi cinco metros rodean la obra -medida obligatoria contra el impacto acústico y la emisión de polvo-, pero también tapan los locales de calle 19 de Abril, ubicada detrás de la Municipalidad de Ñuñoa. Y el ruido de la obra se mantiene gran parte del día.
Sin embargo, la dificultad principal, según reconocen los locatarios, es justamente la falta de estacionamientos, acentuada con el angostamiento de la vía en Manuel de Salas y Jorge Washington -entre Irarrázaval y 19 de Abril- para realizar las obras de construcción.
Por ello la opinión unánime entre los administradores y dueños de pubs y restaurantes es que el proyecto es necesario y atraerá nuevos clientes a los locales. Pero mientras deben encontrar la forma de subsistir en estos “meses difíciles”, hasta que se entregue la primera etapa de la obra, en enero próximo.
Las fórmulas
“Efectivamente nos está afectando, han bajado entre un 30 y un 40% las ventas. Nosotros sabíamos que esto podía pasar, lo que no sabíamos es que iba a ser tan brutal, y estamos tratando de seguir adelante, de trabajar, de seguir haciendo actividades”, comenta Elizabeth Rubio, una de las dueñas del restobar Borne 19, ubicado justo en el centro de la calle 19 de Abril, y por eso uno de los recintos más perjudicados.
La mayor actividad en el sector se produce en la noche, por ello Elizabeth ha invertido en luminarias y letreros para promocionar su local. “No nos vemos y además que la gente tampoco tiene donde estacionar, entonces es más difícil que vengan”, comenta, y asegura que para atraer clientela han bajado los precios y reforzado las presentaciones de grupos musicales y otras actividades los fines de semana.
Incluso les han aconsejado a sus clientes más fieles que mejor lleguen en taxi hasta su local.
También se ha visto obligada a despedir algunos empleados.
“Sabemos que después esto va a ser bueno. El tema es cómo nos mantenemos durante un año”, comenta.
Sebastián Sepúlveda, administrador de Bigas Restobar, ubicado en Jorge Washington, también asegura que “se ha notado la merma de gente, de nuestros clientes”. Comenta que ellos buscan estacionamiento en Simón Bolívar, pero “que la gente camine cinco cuadras, con este frío además, es complicado”.
“Indudablemente (los estacionamientos nuevos) son una mejora al sector que hay que aprovechar. Pero este tiempo va a ser bien complicado en términos de venta”, agrega.
Para contrarrestarlo, extendieron el happy hour en la barra de lunes a jueves hasta la medianoche y han hecho distintas promociones.
En el restaurante Doña Inés, ubicado en 19 de Abril, su administrador, Federico Morandi, también ha notado la baja de público, pero comenta que “coincidió justo con los primeros fríos, no sabemos si es por eso”.
Pero sí reconoce que sus clientes ahora evitan la terraza, que quedó a escasos metros de la construcción y el segundo piso, que hoy otorga una panorámica de las obras. “Es muy feo, arriba se veía la plaza y ahora mucha gente baja, prefiere estar mirando las paredes”, afirma.
En enero se terminaría la superficie
El subdirector de obras del municipio de Ñuñoa, Sergio Villalobos, aseguró que la primera etapa de la obra, que se entregará en enero próximo, será justamente la superficie, para que los pubs y restaurantes del sector puedan normalizar su funcionamiento.
El proyecto completo debería estar terminado en abril de 2011 y comprende 305 estacionamientos subterráneos. La edificación tendrá cuatro niveles, con una superficie de 11.345 metros cuadrados y 12 metros de profundidad. El primero será un boulevard de 1.850 metros cuadrados, y el segundo, tercer y cuarto nivel serán para los estacionamientos.
Villalobos destaca que se han reunido periódicamente en una mesa el municipio, los locatarios, la constructora y la concesionaria del proyecto para evaluar medidas de mitigación. Una de ellas fue la instalación de acrílico en medio de los paneles que rodean la obra y quedan frente a los pubs y restaurantes para que éstos puedan verse. Además, en los mismos paneles se permitirá que los locatarios publiciten sus negocios.