Parten obras de los hospitales prefabricados
Nueve recintos, a un costo de $38 mil millones, deberán estar entregados para su uso antes del invierno del próximo año.
RENÉ OLIVARES S.
(El Mercurio – 27/12/2010)
La semana pasada comenzaron los movimientos de tierra en los primeros hospitales prefabricados, que aportarán 775 camas para reemplazar a los centros de salud, que perdieron casi 2.500 plazas a raíz del terremoto de febrero pasado.
Estas nuevas estructuras para la red de salud tienen un tiempo de construcción promedio de 150 días, por lo que se espera que todas estén listas antes del próximo invierno.
Ése es el compromiso del Gobierno, pese a que una construcción prefabricada de hospital demora más que una estructura similar destinada a escuelas (ya funcionando) o cárceles (que están en proyecto).
Según el arquitecto Jorge Grez, de Construtec, empresa que se adjudicó la reposición del Hospital Félix Bulnes, “si construyéramos los mismos 2.500 metros cuadrados en una obra tradicional nos demoraríamos al menos un año, y bajo el modelo prefabricado nos demoraremos sólo seis meses”.
La dificultad está en que un centro de salud requiere abastecer distintas líneas de gases clínicos (para cada una de las camas del recinto), aire comprimido (para los sillones dentales), climatización y renovación de aire, entre otros elementos específicos.
Las ciudades beneficiadas con estos recintos serán Talca, Curicó, Hualañé, Cauquenes y Parral, en el Maule; Chillán, en el Biobío; el ya mencionado Félix Bulnes, en la Región Metropolitana, y el San Antonio de Putaendo, en Valparaíso.
En total, serán nueve hospitales en ocho ciudades (se construirán dos en Talca), en los que se asegura que los usuarios no podrán notar la diferencia con una estructura de hormigón armado.
Todos ellos requerirán una inversión total de cerca de $38 mil millones, y aportarán un total de 775 camas de hospitalización al sistema público de salud.
Norma sísmica más exigente que la general
La necesidad de que, de haber otro cataclismo como el de febrero pasado, se garantice el funcionamiento de la red de salud hizo que en las licitaciones para estos hospitales prefabricados se incluyeran ciertos requisitos que elevaran los estándares constructivos de este tipo de recintos.
Así es como las normas de resistencia estructural fueron modificadas, endureciendo la disposición general que rige a las construcciones comunes.
Así lo confirma Jorge Grez, de Construtec: “A estos recintos se les aplica la normativa tradicional de resistencia sísmica. La urgencia del sistema así lo permitió, pero igual se nos pidieron cosas más allá de la norma”, cuenta.
Aún así, no son tan estrictas como las de los hospitales definitivos, que se espera que soporten un sismo de 9,5° Richter.