Publicación de la semana: “Walkscapes. El andar como práctica estética”

Walkscapes. El andar como práctica estética / Walking as an aesthetic practice

Autor: Francesco Careri
Editorial: Gustavo Gili S.A.
Idioma: español/inglés
ISBN: 84-252-1841-1
Año: 2002
Dónde comprarlo: Es este link de Amazon y en Librerías Contrapunto


Sobre el libro: El caminar es el medio más primitivo, básico e ineludible por el que el ser humano se transporta de un lugar a otro. En este libro se ofrece una lectura del caminar desde puntos de vista como la peformance artística y la crítica. El recorrido del caminante, su vista del paisaje y lo que lleva dentro de sí durante los períodos de tránsito a pie se han constituido en material para que el arte para tematizar y polemizar.

Luego, según el autor, es el caminar el que configura los espacios en la ciudades: caminar es una postura creativa de interacción con lo urbano. Así, el libro ofrece otra mirada s0bre la ciudad, la configuración de las calles y sus construcciones, no desde las técnicas de la planificación o la profesión de la arquitectura, sino desde las posibilidades reflexivas y transformadoras del peatón que ocupa los espacios de tránsito.

Índice:

– Introducción: La ciudad nómada, por Gilles A Tibergein

– Walkscapes

Errare humanum est…
Caín, Abel y la arquitectura
Espacio nómada y espacio errático
Del recorrido al menhir
El benben y el ka

– Anti-Walk
La visita dadaísta
El readymade urbano
La deambulación surrealista
La ciudad como líquido amniótico
De la ciudad banal a la ciudad inconsciente
La deriva letrista
La teoría de la dérive
Ciudad lúdica contra ciudad burguesa
El mundo como laberinto nómada

– Land Walk
El viaje de Tony Smith
Expansiones de campo
Del menhir al recorrido
Hollando por el mundo
El caminante sobre el mapa
La odisea suburbana
El paisaje entrópico

– Transurbancia
Descalzos por el caos
El archipiélago fractal
Zonzo

– Bibliografía

– Créditos fotográficos

– Agradecimientos

Extracto: (Introducción; La ciudad nómada) “Las observaciones antropológicas, filosóficas, sociopolíticas y artísticas que nos ofrece el autor son puestas también al servicio de un propósito de una gran claridad, cuyo objetivo es conducirnos hasta el momento actual, hasta Zonzo, un lugar puramente lingüístico que podemos encontrar en la expresión italiana andare a Zonzo, que significa errabundear sin objetivo , tal como lo hacía el paseante de la ciudad del siglo XIX.

(…)

La idea que cruza todo el libro, y que el autor expone de un modo convincente -poco importa si es históricamente cierta, con tal de que sea operativa-, es que, en todas las épocas, el andar ha producido arquitectura y paisaje, y que esta práctica, casi olvidada por completo por los propios arquitectos, se ha visto reactivada por los poetas, los filósofos y los artistas, capaces de ver aquello que no existe y hacer que surja algo de ello.”