Descubren contrafuertes que salvaron al Museo de Historia Natural del terremoto
Son ocho refuerzos de hormigón construidos en los años 40 que sujetaron los pilares centrales e impidieron el colapso del edificio.
por Consuelo Terra
(La Tercera – 23/02/2011)
Tras el terremoto del 27 febrero, lo más dañado del Museo Nacional de Historia Natural (MNHN) fueron los muros de su hall central: quedaron inclinados, con grietas estructurales y con un alto riesgo de colapsar en caso de otro temblor fuerte. Según los expertos, este edificio de 135 años de antigüedad debiera haberse derrumbado, tomando en cuanta que sus muros fueron construidos con ladrillos de adobe simple y que pasaron siete terremotos. Pero la razón de por qué eso no sucedió es lo que descubrió la empresa encargada de la reconstrucción del museo.
“Durante enero, cuando comenzaron los trabajos de exploración del estado de los cimientos del edificio, los maestros que cavaban alrededor de los muros se encontraron con una estructura muy dura bajo las columnas del hall central”, cuenta el director del MNHN, Claudio Gómez.
Se trata de ocho contrafuertes de concreto, que apuntalaban por dentro y por fuera las cuatro columnas centrales del museo. “Son dos por cada pilar que sujetan la base de los muros y disminuyen, así, la intensidad de los movimientos sísmicos. “Estaban a cuatro metros de profundidad y calculamos que son de los años 40. Nadie tenía idea de su existencia, fue una sorpresa para todos. La primera conclusión del arquitecto que diseñó el plan maestro del museo, Teodoro Fernández, es que esa es la razón por la que no cayó el hall central”, cuenta Gómez.
Hormigón de los 40
Desde febrero de 2010, el museo permanece cerrado al público, debido a que está a la espera de las obras de reparación. Una de las dificultades que ha tenido este proceso es la falta de planos originales de la construcción diseñada por Paul Lathoud y, la carencia de registros de las numerosas intervenciones posteriores que se le han hecho. Eso explica también, el desconocimiento sobre la existencia de los contrafuertes descubiertos.
Su antigüedad fue determinada gracias al tipo de hormigón, que según los arquitectos data de los años 40. “Creemos que este reforzamiento fue mandado a hacer por Humberto Fuenzalida (director del Museo de Historia Natural entre 1948 y 1964), después del terremoto de 1936. Fuenzalida era, además, geólogo y fundador de la carrera de geología en la U. de Chile. Por lo tanto, conocía muy bien el estado del terreno del edificio”, cuenta Gómez.
En la década del 40, el hormigón estaba recién llegando a Chile y todavía no era una tecnología muy conocida. Recién en los 50 comenzó a masificarse. “Estos contrafuertes de concreto fueron una apuesta pionera para la época”, señala Gómez.
La reconstrucción
La próxima semana comenzarán los trabajos de reforzamiento estructural que permitirán la apertura del MNHN a principios de 2012. Con un presupuesto de $ 130 millones aprobados por la Dirección de Bibliotecas y Museos (Dibam) se afianzarán por dentro los muros del hall central con hormigón armado y se repararán las grietas estructurales.
Fuera de ello, se invertirán $ 250 millones en modernizar el contenido, dotar de accesos seguros, nueva iluminación y aire acondicionado a la sección Chile Biogeográfico, más conocida como “el túnel”: un recorrido educativo en el primer piso creado en 1982.
Esta será sólo una primera etapa, que permitirá abrir el primer piso del edificio. La reconstrucción completa y definitiva podría finalizarse en 2018, según Gómez.