Proyectos de Recuperación de Barrios: el caso de la población 17 de Septiembre, La Serena Chile

En el año 2006, durante el Gobierno Socialista de la Presidenta Michel Bachelet Jeria, se comenzó a implementar, a través del Ministerio de Vivienda y Urbanismo y de los Municipios, la idea de realizar un proyecto de rehabilitación urbana a doscientos barrios en todo el país previamente seleccionados- pero no como los mega proyectos que se construyeron durante la admistración anterior-  sino más bien como intervenciones más acotadas en los barrios más vulnerables. Surge así el programa “Quiero mi Barrio”, en relación a la conmemoración de los 200 años de la independencia de la república de Chile, a celebrarse el año 2010.

Este programa debía concretarse en proyectos al interior de los barrios, con una participación muy activa de sus habitantes en todas las decisiones, lo que se denominó “participación ciudadana”, con una serie de “contratos y obras de confianza”, que fueron creando las bases de un trabajo colaborativo entre el Gobierno Local y sus habitantes.

El caso elegido para este artículo, es la población 17 de septiembre, en la ciudad de La serena, 450 kms al norte de la Capital, Santiago de Chile. Este barrio nace de una “toma” realizada por un grupo de pobladores el año 1966. Las viviendas que conformaron este barrio en un comienzo, fueron en base a casas de madera prefabricadas llamadas “medias aguas”, las cuales principalmente se utilizan para casos de emergencias como terremotos y catástrofes naturales. No se contaba ni con agua potable ni alcantarillado. Con el tiempo, se ha consolidado como un barrio dentro de la ciudad en una zona muy particular en ese entoces en la periferia, en la meseta de una colina, con graves problemas sociales. Sin embargo, la fortaleza y decisión de la mayoría de sus pobladores, por cambiar esta situación y aspirar a una mejor calidad de vida, los llevaron a aceptar y aprovechar este programa gubernamental.

El principal objetivo de este programa fue “contribuir al mejoramiento de la calidad de vida de los habitantes de algunos barrios que presentan problemas de deterioro urbano y vulnerabilidad social, a través de un proceso participativo de recuperación de los espacios públicos y de los entornos urbanos de sus habitantes” y mejorar las condiciones del entorno fortaleciendo las relaciones sociales entre los vecinos.

El Plan consensuado con los habitantes, propuso una reestructuración del barrio, mejorando su conectividad, ya que este tenía un solo acceso generándose un “cul de sac” que propiciaba un aislamiento del resto de la ciudad. Otro de los problemas que se abordaron fue revertir la carencia de equipamientos de servicios, sedes sociales para las reuniones, áreas deportivas, mejorar el espacio público y construir un parque para la recreación de sus habitantes.

Conjuntamente con la elaboración del Plan de Rehabilitación del Barrio 17 de septiembre, el Municipio de la Serena desarrolló un proyecto para construir un parque urbano, y beneficiar no solo a este barrio, sino que a un conjunto de barrios existentes actualmente en ese sector de la ciudad. El proyecto contemplaba la transformación de una quebrada de cauce aluvional convertida por años en un micro basural. Se aprovecharon así las sinergías de complementar dos proyectos que tenían el mismo objetivo: ayudar a mejorar la calidad de vida de los habitantes de los barrios periféricos de la ciudad.

Las etapas y objetivos para lograr desarrollar el Plan de Rehabilitación a escala del Barrio, fueron las siguientes:

• En la primera etapa, se trabajó con la participación ciudadana para generar un listado de proyectos propuestos por la comunidad, y mediante un sistema de ranking, priorizar los 10 primeros para su financiamiento y posterior ejecución.

• Posteriormente, se trabajó en la confección de un acuerdo por escrito el cual sería firmado por los representantes del Barrio y las autoridades a cargo de los proyectos. Lo que se denominó “Contrato de Barrio”, que daba cuenta de las decisiones de los pobladores y los compromisos acordados por ambas partes.

• En la etapa siguiente, se realizó la ejecución de la denominada “obra de confianza”, la cual consistía en la remodelación de una avenida principal del barrio para convertirla en espacios de recreación y juegos para los niños. También se realizaron murales por parte de sus habitantes contando la historia de cómo se realizaron “las tomas” y cómo posteriormente se fueron construyendo algunos equipamientos con la ubicación de la primera escuela básica y la primera iglesia.

• Finalmente, se desarrolló la etapa de los trabajos del diseño de los proyectos elegidos y consensuados con el barrio, y posteriormente las etapas de ejecución de los mismos.

Una de las estrategias que propuso el Plan de Rehabilitación, fue la ubicación de la Sede Social en el borde principal del Barrio, para lograr una comunicación directa con el parque urbano y construir una facha urbana del barrio que se pudiera apreciar desde una de las avenidas principales de la ciudad. Actualmente, las obras se encuentran ejecutadas en un 90%, y lo que partió como un programa novedoso y diferente en su propuesta de participación ciudadana en el proceso de renovación urbana a la escala del barrio, se incorporó dentro de las políticas urbanas del Ministerio de Vivienda y Urbanismo del Gobierno de Chile, y actualmente se continúa con este trabajo de rehabilitación del espacio público con otros barrios también muy vulnerables socialmente.