¿Puede un tren de alta velocidad detener el crecimiento urbano? El caso de Waterloo en Canadá
Los sistemas de trenes en superficie, son sistemas de transporte público que se basan en la generación de viajes mucho más rápidos, eficientes, cómodos y prácticos, en comparación a los viajes que se realizan mediante transporte tradicionales.
Si bien este es un sistema que se utiliza en varias partes del mundo, en junio de este año el Consejo Regional de Waterloo en Canadá, aprobó el proyecto Light Rail Transit (LRT), como la tecnología preferida de la región por los beneficios que trae por sobre los otros métodos de transporte, ya que junto con proporcionar la capacidad suficiente para la población, ha sido presentada como una efectiva manera de detener el crecimiento urbano.
¿Cuáles son las ventajas de este sistema? ¿Puede este tipo de tecnologías frenar el crecimiento de las ciudades?
Por sus características de forma y funcionamiento, el sistema de Light Rail Transit (LRT) se ha transformado en el caso de Waterloo, en una herramienta para dar forma a la ciudad a través de la intensificación y recuperación de zonas al interior de ésta. Así, se genera un impacto en los valores de los suelos, la imagen de la ciudad y la calidad de vida de las personas. De esta manera, el desarrollo se basa en la relación de costo-beneficio, en función de la tecnología y los usuarios.
Manejo del crecimiento urbano
Uno de los tópicos que se discuten en torno al crecimiento de las ciudades, es el impacto que genera éste en cuanto a los desequilibrios entre los usos y actividades al interior de las ciudades. El desarrollo de medios de transporte público masivo como los tranvías en superficie, en teoría permitiría el manejo del crecimiento urbano a través del incentivo y promoción en los terrenos ya existentes al interior de las zonas urbanas.
El sistema funciona en torno al corredor de desarrollo, por lo tanto los desarrolladores están más dispuestos a invertir cerca de un activo permanente del público, como el tren ligero en superficie.
Esta intensificación de uso permitiría que estas zonas al interior de las ciudades, se acrecienten en cuanto a plusvalías y por consiguiente que la ciudad tendiera más a densificarse que a expandirse.
Consideraciones en función de la rentabilidad de este sistema
En el caso de Waterloo, la región ha ido creciendo en función de 3 centros, Cambridge, Kitchener, Waterloo, por lo que la concentración de fortuna, empleo y población, se centra espacialmente en un corredor lineal que conecta las tres ciudades. A esto se le agrega además, que el territorio que queda entre estas ciudades, se ha desarrollado al punto de que sigue existiendo en estos tramos un número eficiente de pasajeros, por lo que se produce un equilibrio a lo largo de toda la ruta. La intensidad de uso y el funcionamiento del sistema, han permitido un desarrollo residencial, institucional, comercial y laboral a lo largo del territorio. Es por esto que, a la hora de proyectar este tipo de sistemas de transporte, es necesario tener en cuenta la capacidad de desarrollo de las áreas que comprenden las estaciones y del volumen de pasajeros, de manera que los viajes se distribuyan de manera homogénea durante todo el día y en ambas direcciones.
Con dos tercios del presupuesto total aprobado (90 millones dólares de costos de origen), la construcción está programada para comenzar en el año 2012, a partir de la introducción de once nuevas estaciones en la región.
Pingback: Friday Faves! 5 Things to Watch and Read « Master in Regenerating Intermediate Landscapes()