Vecinos erradican publicidad en fuente del Cerro Santa Lucía
Diez días alcanzaron a estar tapadas las estatuas de Neptuno y Anfítrite por aviso publicitario.
por Cristián Labarca B. (La Tercera)
Es una de las bellezas turísticas del centro de Santiago y sus vecinos lo saben. Por eso, se alzaron en pie de guerra cuando el lunes de la semana pasada despertaron y, en lugar de la tradicional vista de Neptuno y Anfítrite, los personajes mitológicos retratados en la fuente de calle Merced con José Miguel de la Barra, lo que vieron fue un gran letrero publicitando una marca de ron.
Indignados, mandaron decenas de cartas a los medios y telefonearon al municipio de Santiago. Y el alcalde Pablo Zalaquett contestó, explicando que se había autorizado el sistema de tres paneles -de seis metros de alto-, “al comprometer a la empresa con el financiamiento total de la remodelación del deteriorado monumento”, cuyo costo es de $ 12 millones.
Pero los vecinos no quedaron satisfechos y ayer la empresa decidió eliminar la gigantografía. “Así, los vecinos podrán apreciar las remodelaciones de este importante patrimonio artístico”, dijeron en Havana.
Aldo Salgado vive y trabaja en el sector; es administrador del restaurante Ópera Catedral, ubicado justo frente a la fuente. “Horrible, qué quieres que te diga”, dice de entrada. “Lo que más molestó fue la forma en que la instalaron, sin consultar a la comunidad y justificando que se haría una restauración por un pago ridículo, a cambio de poner una publicidad que durará 60 días”.
Otro vecino, Aldo Gera del Pasaje Rosal, agrega: “Pedimos al municipio que pusiera casetas de seguridad y la respuesta fue que no, porque no iban con el estilo del barrio. En cambio hicieron esto que era grotesco, que producía sombra y quitaba vereda”.
Aunque ya no la verán más, no todos rechazaban el acuerdo entre la empresa y la municipalidad. “El letrero iba a estar por un tiempo acotado”, dice Héctor Vergara, presidente de la Unidad Vecinal Nº 1 Parque Forestal. “Al principio nos molestó, pero el martes tuvimos una reunión con la gente de Havana y las autoridades comunales, y entendimos que estas últimas no tenían dinero para la restauración. El letrero era monstruoso, pero era el mal menor. Lo que importa es que después de 60 días tendremos una plaza hermosa por 30 años”.
La restauración de la fuente debiera estar lista a fines de noviembre y consiste, según el alcalde Zalaquett, “en la incorporación de una mejor iluminación en nichos sumergidos, una segunda bomba de agua, el mejoramiento del borde que produce la cascada y su revestimiento con mortero de granito negro calibrado”.
