Gobierno apoyaría a privados en proyecto de tren Santiago-Valparaíso
Incluso estaría dispuesto a entregar algún tipo de subsidio.
Por Rodrigo Cerda Quintana, EL Mercurio
Por muchas décadas, el tren entre Valparaíso y Santiago fue un gran atractivo y una necesidad para el desarrollo de ambas ciudades. La inauguración oficial de este tramo del ferrocarril se registró el 14 de septiembre de 1863.
Las mejoras de la Ruta 68, el aumento de las flotas de buses y del parque automotor, sumado a la inauguración del túnel Lo Prado en 1970 y del choque de trenes en el puente Queronque, en febrero de 1986, terminaron con dicho servicio.
Hoy, y tras el choque por alcance de 51 vehículos en el que murieron cinco personas, nuevamente se comenzó a escuchar la posibilidad de activar el tramo con un tren de alta velocidad.
El ministro de Transportes, Pedro Pablo Errázuriz, fue claro en señalar a “El Mercurio” que el Gobierno no tiene entre sus planes restablecer dicho servicio, pero reconoció que apoyarían una iniciativa privada en tal sentido.
“Apoyaremos cualquier iniciativa, y si es necesario estamos dispuestos a entregar algún tipo de subsidio”, detalló.
En tanto, el ingeniero y doctor en Transportes de la Universidad Católica, Juan Enrique Coeymans, dijo que eso es inviable, porque el costo de implementar el tren a Valparaíso oscila entre US$ 700 millones y US$ 1.000 millones.
“Ese proyecto significa una inversión muy alta y por el momento no se ha hecho ninguna evaluación socioeconómica que justifique la inversión”.
Para el director de ingeniería de la Universidad Andrés Bello, Daniel Zamora, ese proyecto es tan grande que se deben tener en cuenta una serie de evaluaciones.
“No es tan fácil decir a la primera si se debe o no construir esa ruta ferroviaria. Hay temas políticos, sociales, económicos y de transportes, entre otros, que se deben analizar muy a fondo. Por el momento, lo importante es que hay muchos conductores, especialmente de camiones de carga, que no asumen su rol al ciento por ciento y por eso tenemos los accidentes que tenemos”.
Así piensa también Juan Enrique Coeymans al señalar que en las rutas interprovinciales no hay control de velocidades, especialmente para los camiones de carga.
“Aquí faltan más policías de tránsito en las carreteras. Siempre escuchamos que aumenta la dotación para atacar a la delincuencia y anualmente mueren más personas por accidentes de tránsito que por la delincuencia”, dijo.
COSTOSO
La inversión necesaria sería entre US$ 700 millones y US$ 1.000 millones.