Fiscal investiga origen de incendio en Biobío que afecta a zona con 100 mil habitantes
Siniestro ya consumió 19 mil hectáreas y 150 viviendas, además de producir graves daños a la actividad económica.
por A. Guerrero y C. Argandoña La Tercera
Es el peor comienzo de año que recuerdan en Quillón. Lo que para sus habitantes era alegría y festejos en la madrugada del 1 de enero, durante la tarde se transformó en incertidumbre e impotencia, al tener que huir de sus casas y ver cómo las llamas arrasaban con todos sus recuerdos.
Los fuertes vientos de hasta 30 km/h y la alta temperatura que alcanzó 30 grados no fueron el escenario más propicio para el combate del incendio que se inició el sábado en el sector de Pichiqueime en la provincia de Ñuble (VIII Región) y que luego se extendió en 17 puntos dejando una víctima fatal.
Por ello, el Ministerio Público abrió una investigación que quedó a cargo de la fiscal jefe de Bulnes Maritza Camus, quien investigará el inicio del fuego. La fiscal ya encargó las primeras diligencias a la PDI.
Al respecto, el intendente del Biobío, Víctor Lobos, dijo que “tenemos la información que entregó Forestal Arauco que este fuego se inició durante la mañana del viernes, alrededor de las 2 o 3 de la madrugada en ocho puntos simultáneamente, lo que hace prever una intencionalidad, aunque más antecedentes no tenemos. “.
En la zona se está operando con seis aviones y 10 helicópteros, además de 778 brigadistas que viajaron de diversos puntos del país.
El siniestro forestal afecta a gran parte del Biobío y será uno de los más recordados, por la rapidez y violencia con la que ya se han consumido 19 mil hectáreas (a nivel regional ya suman 21 mil), afectando localidades rurales de Quillón, Florida, Ranquil y Quirihue, y Cauquenes, en la VII Región.
Ayer las llamas ya habían destruido 150 casas y dejado 604 damnificados. Según la Intendencia regional se habían extinguido y controlado 13 de los focos, quedando cuatro aún activos. Entre ellos, el sector de Nueva Aldea donde se quemó una de las plantas de Celulosa Arauco.
Las pérdidas
Margarita Illanes ha vivido en la zona por más de 15 años y el domingo fue testigo de cómo el siniestro quemó el esfuerzo de años. “No había nada, no había bomberos, helicópteros, nada. Tratamos de huir y el fuego nos rodeó, estuvimos cerca de quemarnos y nadie hacía nada. Nos costó mucho salir a la carretera”, sostuvo.
El Presidente Sebastián Piñera recorrió ayer las zonas afectadas, decretando zona de catástrofe en cuatro de las comunas: Quillón, La Florida, Ranquil y San Rosendo. También se evaluaba sumar a esta condición a las comunas de Tomé y Coelemu, por un siniestro que comenzó el domingo, en el sector Bellavista-Cuesta Los Caracoles. En total, en la zona afectada habitan alrededor de 102 mil personas.
Para los habitantes del sector Las Vegas del Sauzal en Quillón, el panorama fue similar intentando, infructuosamente, de apagar las llamas, que por momentos superaban los 10 metros. Marcela Muñoz, junto a su familia, vio cómo el incendio se iba incrementando desde la semana pasada. “Todo empezó el jueves en la tarde. Los trabajos se prolongaron hasta el domingo, cuando declararon la luz roja para evacuar. Ahí se fueron los helicópteros, debido a los vientos. El fuego se veía lejos, pero se empezó a expandir y de pronto ya estaba en nuestras casas. No se podía hacer nada”, comentó Muñoz. “Lo peor es que el sector trabaja con punteras y se cortó la luz producto de las llamas. Con el agua quizás el panorama hubiese cambiado un poco”, añadió.
El incendio ha generado pérdidas importantes en el sector agrícola. Los pequeños agricultores indicaron que árboles de cereza e importantes extensiones de viñas resultaron quemados. “Será difícil recuperarnos. Es un golpe muy duro, que afectará a cientos de fuentes de trabajo”, comentó Udelia Mendoza.
En tanto, hasta ayer permanecía cerrada la autopista del Itata, acceso norte de Concepción.