Autopista Central es intervenida con grafitis artísticos
La iniciativa busca acabar con los rayados en las casetas de control de la concesionaria.
por Carlos Reyes Barría La Tercera
Durante 20 horas seguidas estuvo, este fin de semana, la artista grafitera Francisca Domínguez pintando una de las casetas que lleva el control eléctrico de la Autopista Central, específicamente, una que se ubica en la esquina de General Novoa con General Velázquez, en la comuna de Quinta Normal.
La labor de la artista comenzó a las 11 de la mañana del sábado y continuó ayer por la mañana, para luego finalizar su obra a las 7 de la tarde.
La intervención es parte de un proyecto que la concesionaria creó en 2010, como parte del Plan de Intervención de Infraestructura y que tiene por objetivo erradicar todos los rayados que no aportan al paisaje estético que la autopista le quiere imprimir a sus espacios. “Surgió como una alternativa para solucionar el problema de los rayados vandálicos y también para generar un cambio visual tanto para los usuarios automovilistas como para los pobladores del sector”, dice Paola Zúñiga, jefa de Asuntos Públicos de Autopista Central.
Ya en septiembre de 2010 se había ejecutado el denominado Graffiti del Bicentenario, frente al Parque Hurtado de La Cisterna, que ocupó 300 m2 de extensión y cuyo tema de inspiración fue la geografía del país. En 2011, el turno fue del tramo de la autopista que pasa por la comuna de Santiago, con los mosaicos ubicados debajo del Puente Huérfanos y que recibió el nombre de “Un Movimiento Humano”, que se concretó en noviembre del año pasado. Su dimensión es de 480 m2 y ocupó más de 9.000 cerámicas.
En el futuro, el desafío de la empresa es pintar los más de 10 módulos repartidos en el eje de la avenida General Velázquez -que atraviesa ocho comunas del Gran Santiago- y por el que cruza la carretera de alta velocidad a lo largo de sus 21 kilómetros. Dichas casetas cumplen la función, entre otras, de procurar el buen funcionamiento del tag y el alumbrado de la carretera.
Artista urbana
Francisca Domínguez (24), conocida en el círculo de grafiteros como “Juana Pérez”, comenzó haciendo estas intervenciones hace seis años en las paredes de su comuna, La Florida, y luego continuó haciéndolo en el resto de Santiago. También lo ha hecho en otros países, como Argentina, Perú y Bolivia. Justo el año pasado participó en una exposición de este tipo de arte urbano en la ciudad transandina de Rosario.
Para ejecutar su obra, Juana utilizó 30 tineras de esmalte al agua y 60 aerosoles, eso, además de espejos en forma circular que le dieron un toque especial a su obra inspirada en animales. “Me gusta trabajar con motivos de la naturaleza. En esta caseta, por un lado habrá un león y por el otro un búho”, explica Francisca y agrega: “Estas intervenciones generan un respeto de parte de los otros que practican el rayado con aerosol”. Algo que corrobora Zúñiga, quien cuenta que en casi el año y medio que lleva instalado el Graffiti del Bicentenario, no ha sufrido ningún daño.
El próximo fin de semana será el turno de intervenir otra caseta del sector de General Velázquez, específicamente, en la esquina de Joaquín Walker Martínez con Mapocho.