Comienza demolición de edificios con daños en Viña del Mar
Una torre fue derribada y se alistan trabajos en otros inmuebles.
por María Elizabeth Pérez La Tercera
Con sus jardines secos y las gaviotas como únicos moradores en la torre de 15 pisos, el edificio Festival, en Viña del Mar, es toda una postal del 27/F.
A dos años del terremoto está en abandono, y sólo sus vigilantes y un perro ahuyentan a grupos de intrusos que intentan huir con perillas, llaves o lo que sirva de la torre en ruinas.
Hace más de un año que los dueños de los 110 departamentos -desalojados y con el edificio en pérdida total- aguardan que el Serviu resuelva la traba por la que no pueden vender.
Algunos viven de allegados o en arriendos, y siguen pagando $ 20.000 cada mes para sueldos, agua y luz de la torre, construida por el Serviu en 1980 y que ya fue reparada tras el terremoto de 1985.
El edificio, en Avenida 8 Norte, a pasos de la playa, es inviable de reparar. “Cuesta $ 4.000 millones y demolerlo, otros $ 550 millones”, dice Mafalda Carreño, del comité de administración y que dos años antes había comprado ahí. “Estamos entrabados porque hay 400 m2 del terreno del antejardín, donde están los cimientos, que no tienen dominio. El Ministerio de Vivienda (Minvu) está haciendo trámite para expropiar, pero Serviu nos dice en tres meses y ya va más de un año”, cuenta.
Desde el Serviu Valparaíso explicaron que el 21 de noviembre se presentó un informe a la Contraloría, en que se advierte el “probable colapso del edificio, con consecuencias incalculables para la vida y seguridad de edificios colindantes, problemas de salubridad pública, existencia de plaga y delitos al interior”.
Edificio Tenerife
El edificio Festival es una de las 12 torres con daños severos de Viña y una de las siete para demolición. El proceso ya se concretó en el edificio Tenerife. En noviembre, los vecinos contrataron a la empresa Mario Porzio para echar abajo lo que quedaba de los 22 lujosos departamentos, de más de $ 100 millones.
El seguro les reembolsó $ 1.100 millones. Sin embargo, en enero fueron estafados por uno de los residentes -hoy detenido-, que los engañó con un falso depósito a plazo.
Toledo, Bahía y Acapulco
De las otras torres colapsadas, dos serán demolidas en los próximos días por la empresa Mario Porzio. Su dueño dijo que se trata del edificio Toledo, de 10 pisos, en 3 Norte con 2 Poniente, y que quedó inclinado, y de la torre Bahía.
El costo, explica, lo cancela la comunidad del edificio con el rescate del seguro. “Este proceso toma aproximadamente tres meses, entre permisos y trabajos a ejecutar”, añade.
La Dirección de Obras de la Municipalidad de Viña del Mar sostuvo que tras el 27/F, 224 edificaciones de la ciudad fueron analizadas y 13 obtuvieron permiso de obra.
Una de esas fue el edificio Acapulco, a orillas de la playa. La estructura, de 15 pisos y 115 departamentos, y que había resistido el terremoto de 1985, fue reforzada con fibra de carbono. “Con esto, el edificio queda capacitado para resistir un terremoto con epicentro en Viña del Mar, con mínimo daño”, dice Bárbara Westhoff, presidenta del comité de administración.
Por otra parte, el Minvu otorgó subsidios de reparación para nueve edificios de viviendas sociales, ubicados en la población Limonares, de la Ciudad Jardín.
