Proponen construcción de primer edificio de oficinas en barrio de Gral. Flores
Pese a que el plano regulador permite instalar ahí comercios, apart hotel u oficinas, los vecinos se oponen a su edificación.
por Cristián Labarca La Tercera
Hace 40 años que Carlos Becker vive en Providencia. Fue presidente de la Junta de Vecinos Nº 1 y mantiene un blog con fotografías de las casas que han ido desapareciendo en la comuna. De ahí su disgusto cuando en enero se enteró de la aprobación de un anteproyecto para un edificio de 12 pisos de altura y 9.556 m2, en la esquina de General Flores con Pérez Valenzuela.
La torre, según describe un paper de la Oficina de Arquitectos de Carlos Castillo, es “acristalada y con tres subterráneos para estacionamientos, con un programa de oficinas acorde con el actual destino del sector” y para su construcción requiere del espacio que actualmente ocupan tres casonas, en los números 202, 218 y 238 de General Flores. No es que se necesite demolerlas, pues los gestores del proyecto pretenden construir el moderno edificio sobre las viviendas.
Estas se ubican dentro de la ex Población de Jefes y Oficiales de Carabineros construida en 1930 y que antiguamente incluía, también, las calles Pérez Valenzuela, Santa Beatriz y Cirujano Guzmán.
El problema, dice Becker, es que “los tres inmuebles se ubican en una Zona de Conservación Histórica (ZCH) – según lo estableció el Plan Regulador Comunal desde 2007- que abarca desde el Nº 80 hasta el Nº 238 de la calle General Flores.
Ello impulsó a este vecino del sector a iniciar una cruzada en defensa de esas tres casas. Esto, a través de correos con arquitectos e interesados en la defensa del patrimonio y que pronto fueron copiados a la Seremi de Vivienda y al alcalde de Providencia, Cristián Labbé. “¿Para qué se proclaman zonas de conservación histórica?”, les preguntaban.
La respuesta -de parte de la jefa de la Oficina de Atención al Vecino, Francisca Bunster- no tardó en llegar. “Lo que está aprobado es sólo un anteproyecto, no un permiso para construir, el cual, como tal, está en conocimiento de la Seremi-Minvu, que es la encargada de pronunciarse respecto a intervenciones en ZCH”.
Carlos Castro, jefe del Departamento de Edificación de la municipalidad, agrega que dicha Seremi se pronunció favorablemente a la idea del anteproyecto, “pero este no es un permiso, no sirve para construir. El proyecto definitivo también debe ser ingresado antes a esa secretaría, cuando llegue el momento de solicitar el permiso de edificación”.
Pero el argumento no deja tranquilo a los vecinos. “Es como si la Municipalidad de Santiago aprobara un anteproyecto para un edificio nuevo en la manzana del Congreso”, alega Becker, que no oculta su temor a que estas casonas sean demolidas para dar paso al edificio.
La idea
El gestor de la iniciativa y administrador del apart hotel Nilontraro (sobre el cual se construiría parte del edificio de muro cortina) es Rodrigo Barrientos, quien explica que ello no sucederá, ya que “se trata de la solución para rescatar y recuperar estas propiedades, utilizando una serie de pilares que permiten construir sobre ellas”. De aprobarse el proyecto, dice, quedaría en manos de una inmobiliaria aún desconocida.
Para Ezio Mosciatti, del Comité de Patrimonio del Colegio de Arquitectos este proyecto considera las construcciones existentes “casi como simple decoración, lo que desvaloriza a las otras edificaciones”.
El objetivo es mantener el apart hotel Nilontraro y convertir la antigua fábrica de helados La Escarcha (la casona de la izquierda) en restaurante. De la edificación del medio se mantendría la fachada, como hall de acceso al edificio de oficinas.
“Esta iniciativa es un atentado contra el barrio y es una pésima señal sobre cómo concibe el patrimonio la Municipalidad de Providencia y la forma como lo están abordando algunos arquitectos e inmobiliarias”, agrega Mosciatti.
Nada prohíbe legalmente la construcción de este proyecto. Castro indica que el Plan Regulador Comunal permite la construcción de oficinas, comercio y apart hotel en esos terrenos y al ser ZCH, sólo es necesario respetar la fachada. “El PRC (además) autoriza altura libre”, dice Castro.
El alcalde Cristián Labbé es aún más tajante: “Los barrios no se pueden quedar como están, la ciudad es dinámica. Aquí hay preservación, porque se cuida la filosofía del barrio, y renovación, ya que el edificio está dentro de lo que exige el plan regulador. Si la ciudad no se moderniza, muere”. Y agrega: “En 12 años se construyeron sólo dos edificios, el Paladium y el Euro Holley. Vea cómo se está construyendo hoy en Providencia. Reconozcamos que es una comuna que renació y no ha perdido nunca su identidad”, remata Labbé.