Proyecto permitirá monitorear deshielos glaciares en VI Región
El plan, contemplado para tres años, busca anticiparse a posibles sequías o inundaciones.
por La Tercera
La cordillera que cruza a Chile tiene, de norte a sur, más de 20 mil kilómetros cuadrados de glaciares, reserva estratégica de agua dulce para el país.
En la Región de O’Higgins, donde también existen estas masas de hielo, se disponen a medir su actividad y características a fin de anticiparse a posibles inundaciones o sequías que afecten la zona.
“El modelo de gestión que se quiere construir nos permite hacer pronósticos para el verano con respecto a qué decisiones hay que tomar”, afirma Patricio Rey, intendente de la región.
Sólo este verano, 22 comunas de la zona fueron declaradas en emergencia hídrica. Según la autoridad regional, el plan de monitoreo glaciar permitiría, entre otras cosas, adelantar decisiones como el bombardeo de nubes con que el gobierno busca hacer frente a la sequía que afecta al país o ajustar recursos para el control de embalses.
El plan consiste en la implementación de 11 estaciones de monitoreo ubicadas en zonas estratégicas, como el glaciar Universidad y las cuencas que dan vida a los ríos Claro y Cachapoal.
Las instalaciones medirán precipitaciones, temperatura, radiación, viento, cantidad de nieve y profundidad del glaciar, entre otros datos.
El proyecto, para cuya ejecución se han destinado $ 645 millones, es dirigido por el Centro de Ciencias Ambientales de la Universidad de Concepción y espera comenzar su funcionamiento oficial el 30 de abril.
No obstante, algunas empresas de la zona ya trabajan con estaciones que formarán parte del plan de monitoreo.
“Para lograr la gestión del recurso hídrico una parte importante es entender la fuente de dónde viene el agua”, afirma Gabriel Troncoso, gerente de Desarrollo de Tinguiririca Energía, una de las hidroeléctricas de la zona que hace cinco años mantiene estaciones de monitoreo nivoglaciar en el sector cordillerano.
Según sus investigaciones, el glaciar Universidad, ubicado al norte de San Fernando, ha sido uno de los sostenedores del río Tinguiririca durante los últimos años secos, lo que significaría que la masa de hielo estaría retrocediendo.
Así lo revelan igualmente algunas imágenes satelitales del glaciar, técnica fotográfica que también será utilizada en el desarrollo del proyecto regional.
Esas fotos, no obstante, podrían sorprender a los investigadores. Las imágenes revelan que el glaciar Universidad retrocedió 296 metros entre 1996 y 2010. No obstante, una foto capturada en 1976 mostró al glaciar 290 metros más adelante. Es decir, la diferencia total sería sólo de seis metros.
Informaciones como esas, a juicio de Troncoso, permitirían también garantizar el desarrollo de las futuras generaciones, además de estudiar la influencia que las masas de hielo han tenido en el cauce de los ríos de la región.